Hasta ahora han solicitado ayuda Cataluña, la Comunidad Valenciana y Murcia, pero solo cuatro lo descartan de plano
06 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.La situación que viven casi todas las comunidades autónomas es de emergencia. La falta de liquidez las está asfixiando financieramente. Por ello, el Gobierno quiere acelerar al máximo la puesta en marcha del salvavidas que pretende ser el Fondo de Liquidez Autonómico, aunque no da una fecha concreta para su puesta en funcionamiento. Fuentes del Ministerio de Hacienda aseguraron ayer a La Voz que estará «en cuestión de días, cuando se solucionen los problemas técnicos». Pero hay también una cuestión legal: debe reformarse la Ley de Estabilidad, que hace inviable el rescate. El PP aprobó ayer su tramitación parlamentaria urgente en lectura única para cambiarla. El jueves de la próxima semana se aprobará en el Congreso y luego pasará al Senado. Lo más probable es que pueda entrar en vigor a finales de septiembre o principios de octubre. Hasta entonces, el Gobierno concederá anticipos a las comunidades autónomas que lo necesiten. De momento, solo tres han pedido adherirse al FLA, dotado con 18.000 millones, y cuatro lo descartan.
Las que lo han pedido
Cataluña, la Comunidad Valenciana y Murcia. El Gobierno valenciano fue el primero en acudir a la ventanilla. Pedirá como mínimo 3.500 millones, además de otros 1.000 que pretende lograr mediante un mecanismo que deberá negociar con el Gobierno. Cataluña es la que mayor cantidad ha pedido, 5.023 millones. Afronta vencimientos de deuda por valor de 5.755 millones hasta que acabe el año y tiene graves problemas todos los meses para pagar las nóminas y los conciertos. Por su parte, la Región de Murcia anunció que pedirá en torno a 300 millones.
Las que lo rechazan con rotundidad
Galicia, Madrid, La Rioja y el País Vasco. A solo mes y medio de las elecciones, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, asegura que Galicia no necesita recurrir al FLA, porque es «la comunidad más solvente de España». «Hoy Galicia paga y Cataluña pide», señaló hace unos días.
Tampoco Madrid tiene intención de pedir el rescate, aunque su presidenta, Esperanza Aguirre, admitió ayer que «problemas económicos tenemos todos» y consideró lógico que «las más apuradas» soliciten ayuda, aunque «el Gobierno no está muy sobrado de fondos». El presidente Pedro Sanz presume de que La Rioja «hizo los deberes», por lo que ahora no precisa ningún tipo de rescate. El Gobierno vasco ha descartado «rotundamente» la posibilidad.
Las que seguramente lo pedirán
Andalucía y las dos Castillas. La Junta que preside el socialista José Antonio Griñán ha dado a entender que se verá obligada a acudir al FLA, ya que los mercados están cerrados para obtener créditos. De momento, ha pedido un anticipo de 1.000 millones a cuenta de la recaudación de impuestos para hacer frente a todo tipo de pagos. Tanto Castilla-La Mancha como Castilla y León han insinuado que pedirán la ayuda.
Las que lo descartan, pero solo de momento
Navarra, Extremadura, Baleares, Asturias, Aragón, Cantabria y Canarias. El Gobierno de Navarra descarta por ahora sumarse al FLA, ya que como dijo ayer su vicepresidente José Luis Sánchez de Muniáin «en estos momentos puede cumplir con sus obligaciones de pagos y vencimientos con sus propios medios». La misma posición que Extremadura, que según dijo ayer su presidente, José Antonio Monago, «en principio» no acudirá al FLN ni pedirá anticipos. El presidente balear, José Ramón Bauzá, también ha empleado la expresión «en principio» para explicar que de momento no se acogerá al fondo porque su comunidad aún tiene acceso a la financiación de los bancos. Asturias mantiene negociaciones con las entidades financieras y decidirá si solicita la ayuda al FLA en función del resultado de las mismas, según dijo ayer su consejero de Presidencia, Guillermo Martínez. Aragón y Cantabria se lo están pensando. Canarias no ha tomado una decisión, pero se muestra proclive a adherirse al fondo, siempre que las condiciones sean «óptimas».