La resistencia ante lo que importa

ECONOMÍA

No se da por bueno el silencio ante la venta acelerada de Novagalicia

14 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El FROB, instrumento creado en el 2009 y dotado de herramientas jurídicas poderosísimas, ha subastado en los últimos tres años cuatro entidades (hubo otras dos antes), engordando los balances de los principales grupos bancarios del país. Pagaron por ellas 4 euros (1 por entidad), tras inyectar previamente, o garantizar, más de 11.000 millones en ayudas. ¿Valían cuatro euros entidades con 70.000 millones en depósitos de clientes particulares, la CAM, Unnim, Banco de Valencia y Banco Gallego? ¿Por qué no se explicaron las razones que llevaron a esa adjudicación? ¿Por qué no se conocieron las condiciones de la subasta, si quien la organiza es una Administración pública? No hubo respuesta oficial, y la social fue una tibia sorpresa inicial, y una resignación generalizada después.

El muro gallego. En su quinta operación, el FROB ha encontrado una resistencia real. Preventiva. No se da por bueno el silencio ante la venta acelerada de Novagalicia (tenía plazo hasta el 2017). No se da por bueno que no justifique cómo se organiza (hay decenas de incógnitas). No se da por bueno que nadie, ninguno de sus altos directivos, haya acudido a Galicia a detallar en público la operación (sí han acudido a Barcelona, Valencia o Valladolid). No se da por bueno que la única justificación sea la «confidencialidad» cuando está en juego la primera entidad financiera del noroeste. La que gestiona más de 25.000 millones en ahorros de los gallegos. La que tiene dos millones de clientes. De la que dependen miles de empresas. La única entidad financiera en 80 municipios de la dispersa Galicia. La principal fuente de ingresos para 3.800 familias gallegas, las que emplea Novagalicia.

El ajedrez madrileño. Todo lo anterior queda supeditado al primer mandamiento de esta venta: el precio. Nada importa el empleo, las oficinas, la inclusión financiera en el rural, la toma de decisión pegada al territorio... ¿Por qué la resistencia? Tal vez si repasan el catálogo de deslocalizaciones de empresas gallegas hacia otros grupos lo entenderían mejor... Pero igual no quieren comprenderlo. Porque NCG sea, al final, solo una pieza más del complejo ajedrez político-económico que se mueve en Madrid. Que es el centro, ya saben...

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