Pactan repartirse el control al menos hasta el 2017 y lanzan una opa sobre pequeños inversores para excluirla de la Bolsa
24 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Un acuerdo redondo... pero solo para los principales accionistas de Campofrío. Eso es lo que comunicaron ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la compañía china Shuanghui -que tiene el 36,9?% del accionariado- y el grupo mexicano Sigma -dueño de otro 44,7-, que han suscrito un pacto para repartirse el control de una de las principales multinacionales alimentarias españolas. Tutelarán la empresa hasta, al menos, principios del 2017.
Con ello, cada uno de los inversores evita la delicada tesitura en la que les colocaba la normativa actual: lanzar una oferta pública de adquisición (opa) sobre los títulos que no controlaban o reducir su participación por debajo del 30 %. Asimismo, dan estabilidad a la compañía, pues entre las «materias reservadas» que exigirán el apoyo mayoritario del consejo de administración -al menos, seis de sus siete miembros, cuya presidencia mantendrá Pedro Ballvé- figura precisamente el plan de negocio.
Fruto de ese pacto, que también prevé otras sinergias entre chinos y mexicanos «en materia de futuras oportunidades», ambos han acordado lanzar una opa sobre el 19,3 % de Campofrío (con oficinas comerciales en A Coruña y Vigo) que aún no controlan y que fundamentalmente está en manos de pequeños inversores. Su propuesta -que culminará con la exclusión de la compañía de la Bolsa- fue vista como escasa en el mercado.
Los 6,90 euros que ofrecen están por debajo del valor con que cerraron ayer los títulos de la multinacional (siete euros), y eso que su cotización cayó con fuerza durante la jornada (al final, bajaron un 6,8 %) tras conocerse las intenciones de Shuanghui, primer productor de carne de China, y Sigma, referente en el mercado norteamericano de carnes frías, quedando claramente lejos de los 7,5 euros de la acción el viernes.
Campofrío ha perdido fuelle en el 2013. Al cierre del tercer trimestre, su beneficio había descendido un 61 % por el aumento de los costes. Su ganancia, de 1,8 millones, estuvo lejos de los 15,7 millones del 2012.