Revuelta despeja la crisis de Navantia y fija su saneamiento para el 2017

Beatriz García Couce
b. Couce FERROL / LA VOZ

ECONOMÍA

JOSÉ PARDO

José Manuel Revuelta da por cerrados los momentos financieros delicados por los que atravesaron los astilleros públicos españoles

25 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El presidente de Navantia, José Manuel Revuelta, da por cerrados los momentos financieros delicados por los que atravesaron los astilleros públicos españoles y augura más contratos que vendrán a sumarse a una cartera de pedidos que creció un 41 % desde el 2013. El máximo responsable de la compañía comprometió el mantenimiento de todos -lo repitió dos veces- los astilleros, despejando así las dudas que para algunos representan las obras de eólica marina en la antigua Astano, y anunció que el 2017 será el año en el que se asegurará la «sostenibilidad» de la empresa.

El discurso de Revuelta, realizado en el marco de una jornada sobre las perspectivas de Navantia que se celebró en la Fundación Exponav, se contrapone con las denuncias reiteradas de los representantes de la plantilla sobre la falta de trabajo de los astilleros de la ría ferrolana. Así, afirmó que atajadas las pérdidas «estructurales» que arrastraba la firma -que achacó a «la evolución de la construcción naval, a la falta de competitividad y al desequilibrio de la plantilla»-, los esfuerzos realizados en los últimos años han dado sus frutos en forma de contratos, tanto en la rama militar como en la civil y en la eólica marina. Es lo que ha permitido elevar hasta el 80 % la ocupación de las plantas locales para las que anunció una inversión de diez millones este año y de 13 para el próximo.

Empleo auxiliar

Además, sostuvo que los trabajos en curso han posibilitado actividad para 1.200 empleos en las industrias auxiliares, aunque admitió que los pedidos aún no son suficientes. También reiteró que las proas y otros módulos de los cuatro petroleros firmados el pasado verano para la naviera Ondimar se harán en Ferrol y manifestó su confianza en lograr nuevos encargos en Australia. Además de mantener su papel como constructor para la Armada, Revuelta insistió en la necesidad de incrementar la exportación -planea abrir delegaciones en Noruega y Sudáfrica- y la diversificación.

Mientras se desarrollaban las jornadas, el comité secundó una concentración de protesta para pedir más trabajo.