Los conserveros dan fe de la recuperación del consumo y preparan una fuerte ofensiva en mercados de Asia y África
29 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Con un pie metido en la inevitable reestructuración, el sector conservero gallego se enfrenta además a dos problemas que están poniendo en riesgo su competitividad: la fuerte dependencia de las importaciones de materia prima y competencia desleal por parte de terceros países.
Juan Manuel Cerqueira Ozores pertenece a la tercera generación de una saga que inició su andadura en el sector conservero gallego en 1899, cuando su abuelo, João Baptista Cerqueira creó en Vigo la firma que hoy permanece en el mercado con la marca Pay-Pay. Es, además, activo miembro de la Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescado y Marisco (Anfaco), la potente patronal del sector en España. Su balance del 2015 es más que satisfactorio, pero evita hablar de los procesos de venta o concentración que están en marcha en estos momentos.
-A punto de cerrar el ejercicio, ¿cómo le ha ido este año a los conserveros gallegos?
-Creo que es satisfactorio. Aún sin datos cerrados, se podría decir que el sector va a finalizar un año que bien podríamos considerar como el año del cambio. Lo vemos, porque lo que ha pasado es que el crecimiento de la economía nacional se ha trasladado directamente a nuestras empresas. Y eso que, con todo lo complicado que fue el período de crisis que hemos pasado, esta industria se esforzó mucho para intentar seguir siendo competitiva, y se logró que el consumo se mantuviera.
-¿Cuáles son las cifras de esa vuelta al consumo?
-Bueno, en España el consumo de conservas continúa con su tendencia creciente, y eso lo podemos comprobar fácilmente yendo a la base de datos de consumo alimentario en hogares del ministerio. Yo he recopilado las últimas cifras publicadas del primer semestre de este año y, en comparación con el mismo período del año pasado, la conclusión es que se consumieron un volumen total de 100.000 toneladas por los hogares nacionales. Eso supone un incremento del 3 %, y de un 1 % en valor.
-¿Hay margen para seguir creciendo en el mercado nacional?
-Siempre hay margen, prueba de ello es que el consumo per cápita se ha incrementado casi un 1,5 %. Quiero destacar que son las conservas el único grupo de productos que incrementa su consumo, porque si nos fijamos en las cifras globales de todo tipo de alimentos pesqueros y acuícolas adquiridos por los hogares españoles, el volumen se redujo en un 3,14 %, y per cápita se ha consumido un 4,4 % menos. Creo que son cifras muy significativas.
-Presumen de ser un sector muy exportador. ¿A qué lugares del mundo tiene que llegar todavía la conserva hecha en Galicia?
-Quedan todavía muchos mercados exteriores en donde comercializar las conservas de pescados y mariscos de España. Es verdad y hay que decirlo, que el esfuerzo por la internacionalización del sector ha sido enorme y los resultados están a la vista. En todo este tiempo se ha logrado llegar con nuestros productos a 117 países, lo que hace que nos queden solo otros 77 en donde comercializar estas joyas que elaboramos.
-¿Incluidos los países de la dura competencia asiática?
-Incluidos, desde luego. Por áreas geográficas debemos decir que principalmente el continente asiático y el continente africano es donde se comercializan menos conservas, pero cada año la presencia se va incrementando. -¿Con los procesos de concentración en marcha, cómo está actualmente el peso del sector gallego en Europa?
-La industria gallega se mantiene fuerte y líder del mercado nacional, y supone en este momento el 87 % del total. Eso, en lo que se refiere a España y a la producción total que se comercializa aquí. Si nos centramos en el atún, el principal producto elaborado y consumido en conserva, Galicia representa casi el 60 % del total de la Unión Europea;y España, el 67 %.