Galicia plantea a la UE quedarse fuera de la normativa de purines

Mario Bermendi SANTIAGO / LA VOZ

ECONOMÍA

PRADERO

Bruselas quiere prohibir el riego de abonos por aspersión para evitar la contaminación

29 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La nueva normativa de purines que ultima la UE no convence al conjunto de las comunidades autónomas. De hecho, prevé la supresión del riego por aspersión para evitar la contaminación del suelo. Y esto afecta a miles de explotaciones en España, y también en Galicia, aunque con una menor incidencia por el tamaño de sus granjas. De ahí que la Xunta ya se haya dirigido a la UE para plantear no solo una moratoria sino una excepcionalidad en la aplicación de la norma.

Y su propuesta la sustenta en varios argumentos. En principio, por el factor orográfico. Una parte importante del suelo agrario útil, según Medio Rural, se ubica en zonas de montaña o con limitaciones naturales. La pendiente aquí haría imposible aplicar el abonado tal y como sugiere la normativa, lo que supone un riesgo para las personas. La Xunta plantea también otras dos cuestiones para pedir la excepcionalidad. La primera, relacionada con el clima. Galicia es una comunidad con precipitaciones elevadas durante períodos prolongados, que limita el tiempo disponible para las labores agrícolas y que condiciona el acceso a las superficies y las prácticas de abonado, propiciando además desplazamientos y hundimientos del terreno, con el consiguiente riesgo de que la maquinaria vuelque. Por último, está el tamaño de las explotaciones y su dispersión. En Galicia predomina el minifundismo en granjas pequeñas y medianas, que constituyen el 80 % del total, y el empleo de nuevos sistemas de aplicación de purines requeriría potencia y maniobrabilidad, algo inviable en muchos casos.

Por razones socioeconómicas, la Xunta también señala que la normativa obligaría a realizar nuevas inversiones, por carecer de esta maquinaria específica de aplicación de purines y requeriría además, en muchos casos, tractores con mayor potencia.

Galicia mantiene reuniones con Asturias, Cantabria y Castilla y León para hacer un bloque común.