Es la mitad de crecimiento que hace tres años
18 abr 2019 . Actualizado a las 11:18 h.La luz verde que lleva alumbrando la marcha de la economía española el último lustro sigue perdiendo brillo, como ya venían advirtiendo distintos institutos públicos y privados, pero en los últimos meses lo ha hecho de manera especial. Y es que, según confirmó este viernes el INE, en el último trimestre del 2018 creció a una tasa interanual del 2,3 %, prácticamente la mitad de lo que lo hacía tres años atrás y su menor subida desde finales del 2014.
Fue a finales del 2015 cuando alcanzó su mayor tasa de variación interanual desde principios de la crisis, con un 4,1 % de subida en el PIB. Resultó el mejor contrapunto a su caída más profunda en plena recesión económica que, justo dos años antes, llegaría al -3,5 %.
Desde entonces la economía ha logrado enlazar cinco años consecutivos de crecimiento que, salvo sorpresa mayúscula, serán media docena contando un 2019 para el que el Banco de España prevé todavía una tasa del 2,2 %.
El detalle del informe publicado este viernes refleja que el sector exterior es, a priori, el principal desencadenante de ese descenso más rápido. Las exportaciones marcaron un nuevo récord anual con un valor de 285.024 millones de euros, debido en buena medida al alza de precios, pero en volumen sufrieron su primera caída desde el 2009, aunque más sería un frenazo (-0,1 %). El alivio es que por séptimo año consecutivo hubo superávit con el extranjero, esto es, la economía española se autofinancia.
La deuda se dispara
El Banco de España confirmó ayer que la deuda pública cerró el 2018 por encima del objetivo del Gobierno. Se situó en el equivalente al 97,2 % del PIB, tres décimas más. La comparación, sin embargo, es positiva si se hace con el ejercicio anterior, cuando fue nueve décimas mayor. No obstante, una vez publicados por el INE los datos definitivos del PIB, la ratio del pasivo respecto a la riqueza económica del país se modera ligeramente al 97,16 %. Pero en términos absolutos no hay segundas lecturas positivas. El saldo final de la deuda creció un 2,6 % en tasa interanual y su montante aumentó hasta 1.173.988 millones de euros.