La junta de accionistas de Barreras cesó a García Costas como presidente del astillero. A pesar de la cartera de pedidos, afronta momentos muy delicados por los sobrecostes, los retrasos y deudas con los proveedores
27 sep 2019 . Actualizado a las 21:36 h.José García Costas pasará a la historia de Hijos de J. Barreras por haber sido el presidente que ha logrado contratar la mayor cartera de pedidos de un astillero privado español. Pero también por liderar una errática gestión que ha estado a punto de echar a perder contratos firmados por valor de 900 millones de euros.
Dicen los expertos del sector que si The Ritz Carlton tiene voluntad de acabar en Barreras sus pedidos, algo que a día de hoy es una incertidumbre, el astillero podría enderezar el rumbo, y no sería la primera vez.
Costas, presente en el accionariado de la compañía desde hace 20 años, llegó a la presidencia tras la salida del concurso de acreedores de la empresa en el año 2013. Con su socio de siempre, la naviera Albacora, lanzó una ampliación de capital que dio entrada a la petrolera Pemex y a un sinfín de promesas de pedidos que se quedaron en un flotel.
Costas, empresario del naval y dueño de compañías pujantes en el sector como el grupo Emenasa o Baliño, es un gran conocedor del sector, pero la gestión del mayor astillero de España no es cosa menor, y por momentos se le puso en contra. Tras el fiasco de las promesas incumplidas de Pemex, sus presupuestos a la baja y a la desesperada para conseguir carga de trabajo acabaron conquistando a The Ritz Carlton, que confió en el histórico buen hacer de factoría para adjudicarle nada menos que su primera flota. Otro error de los gestores de Barreras fue aceptar los pedidos de Havila, una naviera inexperta en el segmento de cruceros, que falló en los pagos y hasta en el diseño de los barcos. Dos cruceros más que tampoco tienen fecha de entrega.