Trabajadores de Boeing sobre sus aviones: «Están diseñados por payasos, supervisados por monos»

edurne martínez MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

GARY HE | Efe

Mensajes internos entregados por la compañía a la Justicia agravan la crisis de la firma

10 ene 2020 . Actualizado a las 20:22 h.

Boeing atraviesa horas bajas. Ningún accidente aéreo llega en buen momento, pero el avión ucraniano que se estrelló el pasado miércoles en Teherán (no se sabe bien si de forma fortuita o provocada) y en el que murieron 176 personas lo hace en uno especialmente sensible para la compañía estadounidense, que ha visto cómo la crisis de sus 737 Max -con otros dos accidentes recientes por fallos en su funcionamiento- le ha costado ya más del 20 % de su facturación anual y ha provocado la caída de su máximo ejecutivo, Dennis Muilenburg.

El año ha comenzado con la confirmación de que el modelo 737 Max dejará de producirse y la crisis sigue sin solución a la vista, sobre todo después de los comprometedores mensajes internos de los trabajadores de Boeing que desvelan las dudas que había sobre este avión. La empresa ha entregado estos comentarios a la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA) y a los comités del Congreso que están investigando el 737 Max después de los accidentes.

Entre los mensajes, destacan los que decían que el avión fue «diseñado por payasos, que a su vez son supervisados por monos». La compañía asegura en un comunicado que estos mensajes «contienen un lenguaje provocativo y, en ciertos casos, plantean preguntas sobre las interacciones de Boeing con la FAA en relación con el proceso de calificación de los simuladores».

Estas comunicaciones, enviadas entre el 2017 y 2018, se centran en el desarrollo de simuladores para el Max y sugieren que algunos empleados podrían haber ocultado a la FAA algunos fallos con los aviones, al tiempo que cuestionan el trabajo del regulador estadounidense. En uno de los mensajes que se han hecho públicos un trabajador de Boeing pregunta a otro: «¿Pondrías a tu familia en un avión entrenado con un simulador Max? Yo no lo haría». Y la respuesta de su colega también fue «no», algo muy grave teniendo en cuenta que estos simuladores reproducen las condiciones reales de vuelo de estos modelos de avión.

La compañía envió en diciembre esta documentación a los parlamentarios, antes de que ocurriera el accidente mortal de Teherán, pero cuando el modelo ya había sufrido en un solo año dos accidentes con un balance de 346 muertos en total. «Estas comunicaciones no reflejan la compañía que somos y necesitamos ser, y son completamente inaceptables», remarcan desde Boeing, quienes aseguran que están tomando «las medidas adecuadas» en respuesta a estos mensajes, que incluirán acciones disciplinarias o de otro tipo para el personal, una vez que se hayan completado las revisiones necesarias.

Ejercicio de «transparencia»

El fabricante explicó que enviaron estos mensajes a las autoridades para demostrar su «transparencia». En mayo del 2017 Boeing logró certificar el 737 Max y convencer a la FAA de que los pilotos no necesitaban capacitación en el simulador, sino solo una actualización en el ordenador, lo que ahorraría dinero a las aerolíneas que compraran estos modelos.