Las mil y una versiones del plan europeo para restañar las heridas de la pandemia
20 jul 2020 . Actualizado a las 10:22 h.Muchas son las vueltas que le están dando los líderes europeos al tan traído y llevado fondo de reconstrucción. Y las que te rondaré morena, que diría un castizo. En Europa, ya sabe, nada es fácil. Y, sobre todo, nunca nada termina como empieza.
El germen
Mediado andaba el mes de mayo, con la pandemia golpeando sin piedad sobre la vieja Europa, cuando Merkel y Macron presentaron al alimón un fondo de reconstrucción por el que, sobre todo, España e Italia llevaban semanas clamando. Puso el eje francoalemán entonces sobre la mesa medio billón de euros para hacer frente a la crisis.
El punto de partida
La idea francoalemana fue el germen de la propuesta que luego presentaría la Comisión Europea. Planteó Bruselas la creación de un fondo de 750.000 millones de euros para combatir los efectos de la pandemia del coronavirus, de los cuales 500.000 millones se desembolsarían en forma de subvenciones a fondo perdido y 250.000 como préstamos.
Segunda (y tercera) variación
Se la sacó de la manga el sábado el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. De los 750.000 millones que se habían planteado, 450.000 millones se dedicarían a subvenciones no reembolsables, 50.000 millones menos que la primera propuesta. Mientras, los préstamos ascenderían a los 300.000 millones. Anoche la modificó: 100.000 millones menos en subsidios. Con ello doblaba la cantidad que transfería al capítulo de préstamos en su oferta de la víspera. ¿La cuenta total? 400.000 millones en transferencias y otros 350.000 en créditos. Pero el montante total del fondo no se toca
La oferta de los frugales
Holanda, Austria, Suecia y Dinamarca no están de acuerdo con ninguna de ellas. Faltaría más. De 750.000 millones, nada. Solo 700.000. Y de más subvenciones que créditos, nada de nada. Mitad y mitad.