Reyes Maroto: «Nosotros contamos con Stellantis y con el Clúster gallego»
ECONOMÍA
La ministra de Industria admite que España se ha quedado rezagada en la carrera por el vehículo eléctrico
23 feb 2022 . Actualizado a las 20:02 h.Ayudas europeas para qué fabricantes de automóviles y en qué territorios de la Península. Es la gran incógnita que el Gobierno de Pedro Sánchez deberá resolver próximamente con el PERTE del motor, cuyas convocatorias todavía no están abiertas. Galicia lleva tiempo demandando apoyo para su proyecto, con epicentro en Vigo, pero la inacción y los desplantes del Gobierno español, según denunció el presidente de la compañía, Carlos Tavares, habría disuadido al gigante Stellantis de invertir en una planta de baterías con la que sí contarán países como Alemania, Francia e Italia.
«Stellantis es uno de los principales protagonistas en este proyecto de fabricación de vehículos electrificados en España», aseguró este miércoles la ministra de Industria, Reyes Maroto, en su visita a Bruselas con motivo de su asistencia a la sexta reunión de alto nivel de la Alianza Europea para las Baterías. Trató de apaciguar los ánimos del sector gallego, que acusa al Ejecutivo central de premiar en las bases de la convocatoria a la competencia. «Nosotros contamos con Stellantis, con el Clúster gallego», añadía antes de celebrar que más del 11 % de los vehículos que se fabrican en España son eléctricos. Unos datos que contrastan con la deficiente red de recarga eléctrica, como se encargó de recordar el propio Tavares a finales de enero.
Las declaraciones de la ministra en torno a Stellantis han vuelto a salir a colación cuando se le ha preguntado sobre la ubicación de esa posible primera fábrica de baterías en España de la empresa Volkswagen, a la que aspiran Extremadura, Aragón y Valencia, añadiendo que «será el fabricante el que tiene que hacer público dónde pone esa fábrica».
Maroto ha rehusado poner fecha a la apertura de la convocatoria, aunque confía en que se pueda «confirmar cuanto antes», tanto para la empresa de automóviles alemana «como otros fabricantes», incluido Stellantis. Abrió la puerta a nuevas plantas en nuestro país con esa convocatoria de más de 2.900 millones de euros que servirá «para conocer otros proyectos que sabemos que existen».
España se queda rezagada
Obviando la necesidad de cohesionar el territorio y garantizar la igualdad de oportunidades, Maroto ha explicado que «no se trata de competir dentro de Europa», sino de generar una autonomía en la industria del automóvil. Ha reconocido, como señaló Tavares, que «claramente estábamos quedándonos atrás como consecuencia de que otros países han ido más rápido», como puede ser el caso de Francia y Alemania, con plantas ya en marcha.
Maroto ha dicho que «Europa ha despertado», teniendo en cuenta que dependíamos mucho de otros países a la hora de electrificar nuestros parques de automóviles. La Unión Europea (UE) aspira a construir entre 10 y 20 giga fábricas de cara al 2030 y «Galicia tiene una oportunidad única para seguir estando a la vanguardia, que lo está, en todo lo que va a ser acelerar este proceso de electrificación», aseguraba la ministra.
Unas palabras que poco cuadran con las de Carlos Tavares. El consejero delegado de Stellantis reconoció hace unas semanas que en las últimas décadas España ha buscado y conseguido un fuerte desarrollo industrial, convirtiéndose en el segundo productor de automóviles de Europa. En este sentido, y después de ver cómo anteriores trenes pasaban de largo, Tavares se preguntaba: «¿España quiere perder este trabajo de los últimos 20 o 30 años? ¿O quiere construir sobre ello?». Cabe recordar que el motor gallego genera el 17 % del PIB de nuestra comunidad, factura 8.000 millones de euros y da empleo a 30.000 personas.
Agilizar los procesos de extracción de litio y cobalto
Inmersos de lleno en el conflicto entre Rusia y Ucrania, y tras la aprobación de las sanciones por parte de la OTAN al Kremlin, Maroto ha señalado que Innoenergy ha identificado un mapa de materias primas críticas para la industria de las baterías y ha instado a que «la dependencia que tenemos de otros mercados se pueda sustituir por autonomía propia». En ese sentido ha puesto sobre la mesa la necesidad de «agilizar» los procesos de extracción de litio, cobalto y otras materias primas que se utilizan en la producción de baterías para reducir la dependencia de esta industria de Rusia y volverla más autónoma.