Las comunidades reclaman un fondo extraordinario para afrontar la crisis
21 mar 2022 . Actualizado a las 20:14 h.Al contrario que los trabajadores, que saben que este año perderán mayoritariamente capacidad de compra como consecuencia de la escalada de los precios, los jubilados tienen ahora garantizado de por vida el mantenimiento del poder adquisitivo. Así lo manifestó este lunes el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, quien quiso poner fin a los rumores que circulan en torno a un posible pacto de rentas que incluya la moderación de los ingresos de los cerca de nueve millones de pensionistas.
«Los pensionistas tienen asegurado el poder adquisitivo ya indefinidamente», recalcó Escrivá durante una entrevista en TVE. El ministro puso en valor la nueva fórmula de revalorización de las pensiones que se incluyó en la reforma aprobada recientemente en el Congreso y que vuelve a vincular estas prestaciones con el IPC real. Más concretamente, las pensiones subirán cada año con la inflación media de diciembre del ejercicio anterior a noviembre, como ya sucedió en este 2021.
Pero este nuevo mecanismo llega precisamente en el momento en que el IPC se ha disparado hasta el 7,6 % en febrero y algunos analistas estiman que puede terminar en una tasa superior incluso al 8 % a consecuencia de la guerra en Ucrania, lo que ha generado controversia sobre si la subida puede convertirse en la más alta de las últimas décadas. Pero se eleven hasta donde se eleven los precios, Escrivá prometió que las pensiones lo harán en la misma medida. «Sea la inflación que sea, su poder adquisitivo va a estar protegido», resaltó.
Lo que sí descartó es una actualización antes de que termine el año para compensar la inflación, ya que en el 2022 las pensiones se revalorizaron un 2,5 %, la media del IPC del año anterior. «No podemos estar reevaluando cada mes, o cada tres meses. Se hará una vez al año y será en noviembre de este año. Con la inflación media acumulada se actualizarán las pensiones de todos», reiteró.
No habrá rebaja de cotizaciones
De igual forma, el ministro rechazó en principio una rebaja en las cotizaciones de los sectores afectados por la crisis de la energía, pues considera que los nuevos ERTE que se incluyeron en la reforma laboral ya contienen un recorte en las cuotas de los trabajadores para las empresas afectadas por dificultades transitorias que impliquen disminución de empleo. «Eso ya está en marcha», apuntó.
De hecho, avanzó que en el sector del automóvil en las últimas semanas se han incorporado unos 3.000 trabajadores a un ERTE ETOP (por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción) por los problemas de suministros, y que próximamente se aprobará en el Consejo de Ministros el ERTE sectorial para las agencias de viajes, que se activará a partir del 1 de abril.
En la actualidad hay unos 15.000 trabajadores en ERTE ETOP, frente a los 25.000 del pasado mes de octubre, cuando también hubo problemas de suministro. Sin embargo, Escrivá señaló que «todavía» no se notan en el mercado laboral los efectos de la guerra de Ucrania y los altos precios. Al contrario, marzo será «un buen mes» en el que se crearán unos 150.000 empleos netos, en línea con los años 2017-2019, que fueron buenos, auguró.
Conferencia sectorial
Por otra parte, habrá un fondo extraordinario para afrontar los efectos de la crisis que genere la guerra en Ucrania, así como rebajas fiscales para abaratar la energía, medidas de apoyo a sectores concretos y mayor flexibilidad en el uso de los fondos europeos. Son algunas de las peticiones que las comunidades trasladaron ayer en la conferencia sectorial para el plan de respuesta a la guerra de Ucrania, celebrada de forma telemática.
A su término, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, valoró el «diálogo productivo», y afirmó que el Gobierno trabajará para concretar su batería de medidas.