Los diez días de parón del transporte provocan rupturas en la cadena de suministro: «La situación es terrible»
ECONOMÍA
El presidente de los empresarios gallegos alerta de que los supermercados solo pueden resistir unos días más
23 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Los transportistas encaran este miércoles el décimo día de huelga. Con el paso de las horas se van sumando más profesionales al parón indefinido, para desesperación de empresarios y consumidores: «Es ya un problema de Estado», denunciaron ayer las patronales del consumo, tras el anuncio de Danone de paralizar en 24 horas sus plantas en España.
En comunidades como Galicia ya se han roto algunas cadenas de suministro: «La situación es terrible», asegura el director general de la Federación Nacional de Industrias Lácteas, Luis Calabozo, quien denuncia que no solo no pueden sacar los productos terminados, como quesos y yogures, es que los almacenes están casi llenos y los piquetes tampoco permiten la llegada de insumos, como piensos o ingredientes como la leche, para elaborar quesos. En el conjunto de España están funcionando al 25 % de su capacidad. Los problemas se concentran en Galicia, Asturias, Andalucía, Cantabria, Castilla-La Mancha, Murcia y Castilla y León.
Desde la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice) también tienen miedo de las consecuencias económicas que acarreará este huelga, para la que no se atisba un final: «Numerosas empresas y cooperativas han interrumpido sus procesos de fabricación y se están viendo obligadas a cerrar temporalmente sus plantas por falta de suministros», señalan. Se trata de una crisis industrial sin precedentes: «Nunca habíamos estado tan gravemente afectados», sostienen. Algunas empresas ya han comunicado su intención de solicitar ERTE por fuerza mayor si la huelga persiste.
El presidente de la Federación Española del Vino (FEV), José Luis Benítez, se muestra preocupado por las dificultades para poder envasar y hacer entregas. Se han cancelado pedidos y es difícil conseguir cartón, cajas, etiquetas, tapones y botellas, un problema que ya venía de antes de la huelga: «Los camiones llegan con cuentagotas y se están produciendo roturas de stock y problemas en el suministro», señala. «Un albariño se va embotellando a medida que se van sirviendo los pedidos. El que no haya botella los retrasa», sostiene. Los vinos blancos jóvenes pueden aguantar unas tres semanas en depósito.
Desabastecimiento
En Galicia los problemas han dejado de ser puntuales. La cadena de suministro en muchos sectores está rota, poniendo en riesgo la viabilidad de muchas pymes. Lo confirma el gerente del Clúster Alimentario, Roberto Alonso, quien anticipa problemas más graves en los próximos días: «Dado que la situación es insostenible para la industria, y sumados los parones parciales o totales de la actividad de la producción y las dificultades de la distribución, se incrementará la frecuencia e intensidad de la rotura de stocks. Esto implicará desabastecimiento de ciertos productos».
Ya lo hay, de hecho. El aceite o la carne apenas llega a los lineales de los supermercados. El presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), Juan Manuel Vieites, asegura que alguna cadena ya ha empezado a cerrar supermercados en Galicia. Y otras podrían seguir los pasos: «Las cadenas están a medio gas y tienen para resistir unos días, no más. Estamos en una situación límite», alerta visiblemente enfadado por la falta de reacción del Gobierno central: «Tienen que sentarse a negociar. Están parando el país y las pérdidas van a ser grandísimas», lamenta.
Algunas cadenas ya están agotando las reservas de sus almacenes y han optado por abastecer del poco producto que entra a los supermercados más céntricos.
