Inditex vende su negocio en Rusia, pero deja abierta la puerta a operar con franquicias

G. Lemos REDACCIÓN

ECONOMÍA

MAXIM SHIPENKOV | EFE

Traspasa el medio millar de locales que tenía en el país al grupo emiratí Daher, que preservará el grueso de los 9.000 empleos

26 oct 2022 . Actualizado a las 13:53 h.

Inditex le dice hasta luego al mercado ruso. Tras semanas de rumores, la multinacional textil gallega confirmó ayer que ha cerrado un acuerdo para venderle su negocio en el país al grupo emiratí Daher, un conglomerado «con participaciones relevantes en los sectores de la distribución e inmobiliario» y dueño del centro comercial Dubai Mall. La operación, cuyo importe no ha trascendido, incluye el traspaso de la mayoría de las 502 tiendas que la empresa presidida por Marta Ortega gestionaba en Rusia hasta que cesó su actividad el pasado 5 de marzo, tras la invasión de Ucrania.

El traspaso de los locales comerciales al comprador permitirá, siempre que se obtenga la autorización administrativa, mantener «una parte sustancial» de los 9.000 empleos que la empresa gallega sostenía en el país, según recoge el comunicado que Inditex envió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para informar de la operación.

Si cuenta con el visto bueno de los arrendadores (la mayoría de locales están en régimen de alquiler) Daher transformará las actuales tiendas de Zara y del resto de enseñas del grupo gallego en Rusia en puntos de venta de las cadenas que gestiona con contratos de franquicia, entre las que se incluyen primeras marcas de moda (Gap, Adidas, Reebok, Mango, Intimissimi o Calzedonia), restauración (Paul) o electrónica (Bose y Virgin). Serán tiendas «totalmente ajenas a Inditex», recalcan en el comunicado.

Al menos de momento. Porque el acuerdo recoge la posibilidad de que, si las circunstancias cambian y la empresa gallega ve oportuno volver a comercializar su ropa en Rusia, lo haga a través de un contrato de franquicias con el grupo emiratí, que a través de su filial libanesa Azadea ya comercializa sus marcas en otros mercados del norte de África y Oriente Medio.

Antes del cese de operaciones, Rusia era el segundo mayor mercado de Inditex después de España, aportando cerca del 8,5 % del resultado neto de explotación global —86 millones de euros en el 2020 y 229 en el ejercicio previo— y casi el 5 % de las ventas, que rondaban los 1.000 millones de euros. Pese a ello, Inditex destaca en el comunicado remitido a la CNMV que la provisión registrada en las cuentas del primer semestre, de 216 millones, «cubre sustancialmente el impacto del cese de actividad del grupo en Rusia».

Inditex no es el primer gigante textil que decide cesar definitivamente sus operaciones en Rusia. A finales de julio, la sueca H&M puso a la venta su negocio en el país, donde contaba con una red comercial de 170 tiendas en 65 ciudades, un centro logístico y más de 200 millones de euros en mercancía almacenada. Unas existencias que trató de liquidar con la reapertura a principios de agosto de una decena de establecimientos en Moscú y San Petersburgo, que se colapsaron con grandes colas de consumidores. En sus cuentas del tercer trimestre de su ejercicio fiscal, que finalizó en agosto, la empresa sueca computó un gasto extraordinario de 192 millones por su salida del mercado ruso.