El mercado laboral acelera y cierra el mejor febrero desde la crisis financiera
ECONOMÍA
La Seguridad Social incorporó más de 103.000 nuevos cotizantes, 4.500 en Galicia. El Gobierno da marcha atrás y no publicará los datos de fijos discontinuos
04 mar 2024 . Actualizado a las 19:29 h.Tras el habitual mal inicio de año (en enero se destruyeron 231.250 puestos de trabajo), el mercado laboral recuperó el brío y aceleró el paso en el segundo mes del año, que cerró con el mejor registro de creación de empleo en un febrero desde el pinchazo de la burbuja inmobiliaria y la crisis financiera que siguió.
En concreto, el mes pasado se dieron de alta en la Seguridad Social 103.621 nuevos cotizantes, el mejor registro desde el 2007, lo que supone la creación de 25.000 empleos más que en febrero del año pasado. Un incremento que deja el total de afiliados por encima de la barrera de los 20,7 millones. En Galicia se incorporaron al mercado de trabajo 4.488 nuevos ocupados, por lo que el total de cotizantes asciende ya a 1.055.018.
Por sectores, los que más tiran del empleo asalariado (régimen general) son la hostelería, con 29.230 nuevos cotizantes; seguida de la educación, con 28.941; la construcción, con 18.189, y la industria manufacturera, con 13.130. Por el contrario, las actividades que más afiliados pierden son la sanidad y los servicios sociales, con 10.252 bajas, y el comercio, con 9.590.
Febrero también fue un buen mes para el empleo por cuenta propia, ya que la Seguridad Social incorporó 10.100 nuevos autónomos. La construcción fue el sector con más altas en este régimen, 1.830, aunque también despuntan otros de alto valor añadido, como las actividades profesionales, científicas y técnicas, que ganaron 1.657 autoempleados. Incluso el comercio pudo contener la hemorragia con más de 200 nuevas altas, aunque el balance en el último año sigue teñido de rojo, con cerca de 10.700 tiendas cerradas.
El paro cae
Ese tirón de la afiliación a la Seguridad Social trajo como contrapartida una nueva reducción del paro registrado, aunque en una proporción muy inferior. Fueron 7.452 los inscritos en el Servicio Público de Empleo Estatal que dieron de baja su demanda de empleo el mes pasado, de ellos 518 en Galicia.
Esa desproporción entre el repunte del número de cotizantes y la caída del paro se podría explicar, además de por el crecimiento de la población activa (personas que antes no buscaban empleo empiezan a hacerlo por la buena coyuntura económica), por el hecho de que buena parte de los nuevos afiliados son fijos discontinuos que se encontraban en período de inactividad en sus empresas, un tiempo en el que no computan como parados registrados, por lo que ahora al ser llamados de vuelta a la actividad sí se registra un movimiento en la estadística de cotizantes a la Seguridad Social pero no en la de demandantes de empleo.
Pero, de momento, será imposible cuantificar ese fenómeno, porque el Gobierno ha dado marcha atrás y rechaza ahora ofrecer el dato de los fijos discontinuos que se encuentran inactivos. A pesar de que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, adquirió ese compromiso hace más de un año, su número dos anunció ayer que no cumplirán la palabra: «Nosotros nos hemos comprometido a poder dar ese dato una vez que se haya depurado, pero la realidad es que no podemos avanzar y, simple y llanamente, no lo podemos ofrecer. Es un dato que no tiene consistencia, no tiene coherencia si lo damos porque incluye muchas más categorías que los fijos discontinuos», se justificó el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey.
Más temporales en Galicia
El mes pasado se firmaron en España más de 1,13 millones de contratos, de los que el 46 % fueron indefinidos, una proporción casi diez puntos superior a la registrada en Galicia, donde solo 18.300 de los 49.600 contratos firmados fueron fijos, un punto que los sindicatos destacaron como el gran caballo de batalla del mercado laboral en la comunidad.
Mientras, la patronal CEOE recordó que, pese a los buenos datos de empleo, España sigue encabezando la lista de los países de la OCDE con más paro, y ello a pesar «de la dificultad que tienen las empresas de determinados sectores para encontrar trabajadores». Por ello, insistió en la necesidad de ajustar la oferta curricular del sistema educativo y las «pasarelas» entre políticas pasivas y activas de empleo.