Galicia defiende un futuro industrial con energía verde

Beatriz García Couce
Beatriz Couce REDACCIÓN

ECONOMÍA

José Bogas, Alfonso Rueda y Xosé Luís Vilela, en la apertura del foro
José Bogas, Alfonso Rueda y Xosé Luís Vilela, en la apertura del foro GONZALO BARRAL

Administraciones y empresas ponen el acento en la importancia del suministro energético para los proyectos empresariales en la comunidad

22 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Exprimir al máximo las ventajas de la transición energética para impulsar el desarrollo industrial es uno de los desafíos que tiene Galicia, una de las comunidades del país que décadas atrás usaron sus minas para generar electricidad en centrales de carbón y ahora apuestan por las energías renovables. La importancia del binomio industria y energía quedó de manifiesto ayer en un foro organizado por Endesa y La Voz de Galicia bajo el título Un plan de futuro industrial para As Pontes y Galicia, en el que quedó patente la preocupación existente por el bloqueo judicial a los proyectos eólicos.

Tanto el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, como el consejero delegado de Endesa, José Bogas, aludieron a esta problemática en las intervenciones que abrieron el encuentro, que fue conducido por el director del periódico, Xosé Luis Vilela. El jefe del Gobierno gallego defendió las potencialidades de la comunidad tanto para desarrollar tanto nuevas instalaciones de generación, como grandes complejos empresariales. «Tenemos una buena posición geográfica, recursos naturales y también estabilidad y tranquilidad política para poder hacer inversiones», reseñó, al mismo tiempo que insistió en el compromiso de su Ejecutivo para «facilitar que lo que ya está se consolide y crezca, y también apoyar al que quiera venir».

Frente a las posturas de quienes se oponen a proyectos «sin conocer las características ni sus requisitos», Alfonso Rueda defendió una acción «con valentía», ya que entiende que «el futuro industrial de Galicia está amenazado». Buena parte de las grandes inversiones industriales proyectadas para la comunidad están ligadas al suministro de energía renovable —más barata de generar y, por tanto, más competitiva—, por lo que la suspensión que están padeciendo los expedientes de parques eólicos como consecuencia de decisiones judiciales puede comprometer su desarrollo. «A la Xunta no le gustan las últimas resoluciones judiciales, y lo que hay que hacer es reaccionar y también avisar de los perjuicios que pueden causar», advirtió.

El presidente del Gobierno gallego defendió el trabajo realizado por sus técnicos en la evaluación de los proyectos eólicos y emplazó a las empresas a realizar una labor didáctica para acercar los proyectos a la gente. «La Administración tiene que transmitir que somos garantistas, y también ser un poco imaginativa», afirmó, en alusión a la reciente creación de una sociedad mixta para maximizar en el territorio los beneficios de la explotación de sus recursos naturales. 

Restauración con acuerdo

El consejero delegado de Endesa reconoció que «sería deseable» un pacto de país para que la transición energética pudiese ser, en palabras del director de La Voz, «pacífica y rentable». José Bogas señaló, no obstante, que el diálogo y el consenso han sido la base de la estrategia del cambio de modelo de negocio de Endesa en el marco de la descarbonización. Así, recordó que el cierre de la mina a cielo abierto de As Pontes se produjo, en el 2007, «con un pacto con los trabajadores». Ese acuerdo se tradujo en un espacio natural, un gran lago, después de que se hubiese restaurado la escombrera. En ese enclave, convertido en un emplazamiento de recreo para los ciudadanos, hay más de 600.000 árboles, y 200 especies animales.

El cierre de la central térmica se acometió, añadió, también con diálogo con los representantes de los trabajadores, y con el diseño de «un plan muy bonito» para impulsar la energía verde y captar nuevas industrias para As Pontes. Endesa cuenta con 1.000 megavatios de renovables —566 eólicos y 440 hidroeléctricos—, además de 840 del ciclo combinado. «Tenemos presencia en Galicia, pero nos gustaría tener más», afirmó el consejero delegado de la compañía, que basó su apuesta de futuro en la comunidad en el desarrollo de otros 800 megavatios con varios parques eólicos. Sin embargo, la mayoría —unos 500— se encuentran afectados por recursos judiciales. «Desarrollar industria es prioritario, y eso también implica desarrollar energía», incidió.

Bogas alertó, no obstante, de que, pese a que España cuenta con una ventaja diferencial, al tener la energía más barata de Europa, presenta un problema preocupante, al no concretar los plazos en los que algunos proyectos industriales podrán conectarse a la red. La inseguridad que están provocando los fallos judiciales también arroja, advirtió Bogas, algunas amenazas. «El primer daño que se produce es que se para la inversión», y alertó, además de la posible fuga de actuaciones empresariales a otros lugares.

Pese al escenario desfavorable, Endesa continuará apoyando la revitalización industrial de As Pontes, para la que ha captado algunas inversiones, como la bioplanta de Ence. 

El exalcalde de Paradela, José Manuel Mato, y el regidor pontés, Valentín González Formoso
El exalcalde de Paradela, José Manuel Mato, y el regidor pontés, Valentín González Formoso VÍTOR MEJUTO

Ventajas para los concellos

Frente a los que se oponen a los parques eólicos, el alcalde de As Pontes, Valentín González; y el exregidor del municipio de Paradela (Lugo) y diputado autonómico, José Manuel Mato, pusieron de relieve las ventajas de este tipo de instalaciones para los concellos y también para el entramado empresarial gallego. Mato recordó cómo, cuando empezaron a plantearse los proyectos eólicos en Paradela, «vinieron personas de fuera a decirnos cómo vivir», ya que se oponían a su instalación. Sin embargo, las instalaciones llegaron a buen puerto, enmarcadas en un proceso de diálogo. «Endesa llegó a un acuerdo con el 90 % de los propietarios, casi no hubo expropiaciones», recordó. Como consecuencia de la materialización de aquellos proyectos, se mejoraron infraestructuras, y se garantizó la convivencia entre los parques y las explotaciones agroganaderas. «Paradela y sus ciudadanos ganaron mucho con Endesa. Los vecinos mejoraron su nivel de renta y su calidad de vida», sentenció.

El alcalde pontés tiene claro que «hoy en día, apostar por la eólica significa apostar por algo a contracorriente», pero insistió en que este tipo de plantas de generación verde son indispensables para el desarrollo industrial de la comunidad. «Es un regalo para la Galicia del futuro», aseveró. Valentín González Formoso recordó que la mayor preocupación de los ciudadanos es el empleo, que no será posible con un bloqueo que pone en peligro un suministro competitivo a las futuras industrias.

Precisamente por el desarrollo del plan de reindustrialización impulsado por Endesa y el apetito inversor de grandes compañías, su municipio está llamado a convertirse, «en el principal enclave industrial de Galicia». Proyectos como los de Ence, Reganosa, Universal Kraft y Sentury abren grandes oportunidades para impulsar el crecimiento económico en la antigua villa minera, pero algunos dependen del suministro de energía generada con fuentes renovables, por lo que la paralización de los recintos eólicos puede tener consecuencias para su implementación. «Hay que intentar buscar soluciones a un bloqueo del que tiene culpa mucha gente», advirtió. Vincular los proyectos energéticos a inversiones industriales es una de las herramientas que defiende el regidor pontés para que la sociedad aprecie la importancia de las instalaciones generadoras para el empleo y la actividad en la comunidad, una política que aplica la Xunta y que, afirma, resulta «un buen trabajo». 

Más agilidad

Las empresas que escriben la letra pequeña de la reindustrialización en Galicia reclaman a las Administraciones que sean ágiles en el desarrollo de los trámites burocráticos. González Formoso reconoció que las tensiones geopolíticas le causan preocupación, ya que entre la cartera de proyectos lanzados para su municipio se encuentran algunos de capital extranjero, como el de la china Sentury y el de la sueca Universal Kraft.

En el foro impulsado por Endesa y La Voz de Galicia se realizó también una defensa del trabajo de los centenares de técnicos y funcionarios que intervienen en las Administraciones central y autonómica para tramitar los parques. Nicolás Vázquez, secretario xeral de Industria, recordó que «con su firma quieren garantizar que lo que están avalando es acorde con la normativa» y lamentó el «activismo y la oposición» contra los proyectos renovables. Por ello, pidió Vázquez, un pacto para transmitir la necesidad actual de apostar por las fuentes renovables para el desarrollo y el crecimiento de la comunidad.

El consejero delegado de Endesa le puso deberes también a las Administraciones: «Tienen que ser ágiles, porque ahora se necesitan 50.000 papeles en 50.000 ventanillas distintas, y si al final sucede que te paran los proyectos, todo se hace muy difícil». No obstante, pese a las complicaciones, el máximo directivo de la eléctrica confía en lograr sus objetivos en Galicia. «Tenemos un presente incierto, pero un futuro prometedor», subrayó.