La contratación de portugueses en Galicia ha descendido un 30 % en solo cuatro años

C. P. REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

J. M. CASAL

Los costes laborales han aumentado más en el país luso que en España desde el 2019

18 nov 2024 . Actualizado a las 21:08 h.

Los precios competitivos del suelo industrial, la baja fiscalidad —de las rentas y las empresas— y la subida de salarios son las tres bazas que está jugando el Norte de Portugal para competir con Galicia a la hora de atraer compañías y trabajadores cualificados a su territorio. La estrategia está funcionando, de acuerdo a los últimos datos del Informe de Indicadores de Movilidad Transfronteriza en la eurorregión Galicia-Norte de Portugal que presentó este lunes la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG).

Las mejoras competitivas al otro lado de la raia han hecho que muchos portugueses opten por quedarse a trabajar en su país y eso se nota en la caída de las contrataciones en Galicia. En el 2019, los empleados lusos firmaron 9.690 contratos en la comunidad. La cifra descendió  en el 2023 hasta los 6.773, un 30 % menos.

Hay otro dato que ilustra el atractivo que despierta la región vecina: hay el doble de trabajadores gallegos desplazados a Portugal (11.565) —más de la mitad son de la provincia de A Coruña— que empleados lusos desplazados en Galicia (5.533).

El problema, como indica la CEG, es que «la evolución del número de empresas en Galicia en los últimos años presenta una tendencia en la práctica totalidad de los sectores decreciente, se pierden empresas», y no hay forma de parar la sangría.

Los vecinos lusos que deciden atravesar la frontera y trabajar en Galicia, lo hacen mayoritariamente en la construcción —en el 2023, se inscribieron casi un centenar de compañías lusas en este sector en la comunidad, frente a las 49 gallegas que se registraron en el país vecino—. Según los datos de la Seguridad Social, en el último ejercicio se registraron 1.458 afiliados lusos en actividades vinculadas al ladrillo. Le sigue el transporte y almacenamiento, con 1.340 nuevos inscritos de esa nacionalidad en la comunidad.

Costes laborales

Con estos datos en la mano, no parece que la subida de los costes laborales haya tenido un gran impacto en Portugal porque partían de umbrales sustancialmente más bajos que los españoles.

Desde el 2016, el salario mínimo luso se incrementó casi un 55 %, hasta alcanzar los 820 euros en la actualidad. En ese mismo período, el SMI en España se disparó casi un 102 %, pasando de los 655,2 a los 1.323 euros en la actualidad (en doce pagas). A pesar de ello, y según refleja el informe, los costes laborales han aumentado más en Portugal (18 %) que en España (12,8 %) en los últimos cinco años.

Desempleados

Aunque la eurorregión que conforman Galicia y el Norte de Portugal cerró el 2023 con una población activa de 3.119.300 personas, casi seis de cada diez se registran al sur de la frontera, donde la cifra de parados es inferior (7,3 %) a la gallega (9,2 %). El dato esperanzador es que Galicia ha conseguido reducir sensiblemente la brecha de desempleados respecto a sus vecinos meridionales —en el primer trimestre del 2021, los parados representaban el 13 % de la población activa en la comunidad—. La región lusa, por su parte, solo ha mejorado una décima desde entonces, y allí ha aumentado un 1,1 % el número de ninis (ni estudian ni trabajan), frente al descenso del 1,5 % en Galicia.