Los directores de Educación ajustan su propuesta para que no sea centralizadora
17 may 2019 . Actualizado a las 13:27 h.El Ministerio de Educación parece apostar claramente por las llamadas bases para el acceso a la profesión docente (APD), firmadas por ochenta decanos de Educación y 120.000 estudiantes, y que se presentaron ante altos responsables de la Educación española, que las acogieron como lo que son, «un texto académico» y que esperan se conviertan en uno de los ejes del pacto educativo. Por eso, Marcial Marín, número dos del ministerio (Méndez de Vigo estaba en Bruselas) recibió a decanos y alumnos y aseguró después a los periodistas que entregará el documento ante la subcomisión del Pacto por la Educación. Curiosamente, esta asamblea no recibió durante el período de audiencia a los decanos, a pesar de que estos lo solicitaron. En paralelo también llevará el texto al seno del grupo de trabajo para este acuerdo educativo de la Conferencia Sectorial de Educación (Canarias es la comunidad que se encarga de la formación docente) y finalmente Marín quiere que la estudien los rectores de CRUE Universidades Españolas.
La secretaria de la Conferencia de Decanos y directora de la facultad de Santiago, Carmen Fernández Morante, fue una de las personas que acudió a la reunión en el ministerio. Allí les esperaban tres altos cargos (secretario de Estado, secretario de Universidades y director general de Evaluación). No es la primera vez que se veían decanos, estudiantes y altos funcionarios; a primeros de mes ya hubo un encuentro informal al que también asistió el conselleiro de Educación, Román Rodríguez, cita que determinó estas reuniones.
Al término del encuentro, Marcial Marín dijo de sus interlocutores que «son los que mejor conocen el sistema en el día a día» y que por tanto su propuesta de formación de docentes es «oportunidad histórica que debemos aprovechar». La cita no fue solamente protocolaria. Los representantes de los decanos y estudiantes desglosaron punto por punto la propuesta, analizando todos los aspectos y contestando a las cuestiones de los ministeriales. Al salir, los periodistas preguntaron a Marín por qué no han atendido a las reclamaciones de estos colectivos (decanos y estudiantes) antes de encargar el Libro Blanco de la Función Docente a José Antonio Marina, y el secretario de Estado admitió que en el ministerio no conocía este estudio: «Todos los días aprendemos. Es un trabajo que desconocíamos y lo tengo que decir».
«Operar una apendicitis es igual en Barcelona que en Lugo, pero no es lo mismo dar clase en un CRA que en un colegio de Madrid»
Lo cierto es que estaban francamente interesados. «Durante todo el tiempo -valoró Carmen Fernández Morante- vimos absoluta predisposición por parte del Ministerio». Eso sí, asumen que esto solo saldrá adelante si hay consenso, «y en aras de ese consenso entendemos que se puede adaptar alguna medida puntual», recalca la decana de la USC.
El primer ajuste lo hicieron motu proprio. Quieren hablar con todos los grupos, buscar amplias mayorías y tranquilizar a quienes temen que este sistema de acceso a la profesión docente sea centralizador. Por eso, han modificado ligeramente su propuesta porque «operar una apendicitis es igual en Barcelona que en Lugo, pero no es igual estar en un CRA que en un colegio de Madrid», como explicaba Carmen Fernández Morante, secretaria de la Conferencia y decana de la USC. Ahora proponen que la prueba tras el grado se haga de forma consensuada con las comunidades autónomas, aunque haya cierta flexibilidad para hacer prácticas por todo el Estado.
«Cambiaría este país, el permitir a los docentes que pudieran tener una carrera profesional en la que innovar, implementar nuevas metodologías»
El presidente de la Conferencia de Decanos, Juan Carlos San Pedro (responsable de la facultad de Oviedo), está esperanzado con que su idea sea oída, porque «cambiaría este país, el permitir a los docentes que pudieran tener una carrera profesional en la que innovar, implementar nuevas metodologías», algo que se reconozca además de la antigüedad. Porque en el documento no solo se habla del mir docente -nombre que no les gusta a los decanos-, sino de la carrera profesional de los profesores.
San Pedro comentó que esta se diseña desde antes de comenzar, y recordó que «en estos momentos hay 150.000 alumnos en toda España y esto no permite trabajar con cuidado ni con experimentalidad». Asimismo, señaló, según recogía Europa Press, que el 'practicum' no tiene suficiente recorrido académico y, por ello, plantean ampliar la formación de los aspirantes a profesores en 'centros educativos de referencia', como los hospitales universitarios donde acuden los futuros médicos. «Este periodo que pasan preparando una oposición podría desarrollarse en un centro educativo», ha planteado.
Carmen Fernández Morante dijo al respecto que «sería conveniente» poner en marcha un proyecto piloto de un par de años para «depurar el modelo» antes de su puesta en marcha definitiva, aunque según el ministro Íñigo Méndez de Vigo podría ser en 2020.
Reunión con los grupos políticos
En paralelo a lo anterior, los decanos presentaron el trabajo a los parlamentarios del PP en el Congreso y del PSOE. Los primeros están encantados con su propuesta, mientras que los socialistas se mostraron escépticos, ya que dejaron claro que este mir no se puede llevar a cabo si no hay una partida económica que lo respalde y hoy, temen, eso es imposible. También hablaron los profesores con representantes de Ciudadanos, aunque no hubo una reunión sino una llamada de teléfono para una cita inmediata; solo les queda concertar una entrevista con Podemos, así como con los grupos políticos más pequeños, aunque la cita con el PNV la tienen bastante avanzada. Y todo antes del día 5 de marzo, que presentarán su propuesta al Senado.