«Rajoy fue a Nueva York a reunirse con Alcoa; Sánchez fue y habló de Franco»

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO / LA VOZ

ELECCIONES 2020

Xaime Ramallal

Aupado por Casado tras la renovación del comité ejecutivo popular, pasa la semana en Madrid con un ojo en Galicia

08 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Si a alguien hay que preguntarle por la transformación política de Pablo Casado hacia la moderación es a Jaime de Olano, diputado por Lugo desde el 2011. Entonces conoció al que hoy es el candidato a presidente, al que apoyó desde el primer momento.

-¿Cuál es el Casado auténtico, el de abril o el de ahora?

-Estoy cerca de él, y es verdad que ahora transmite más tranquilidad. Pero hay que recordar las tensiones que existían en las pasadas elecciones, con Sánchez negociando con Torra sobre un documento anticonstitucional y convocando elecciones. Eso generó cabreo y urgencias, pero se ha modulado y ahora tiene un tono más propio, como es él, afable, abierto, cercano y dialogante.

-Usted que anda ahora por Génova, ¿quién tiene más predicamento allí, Aznar o Rajoy?

-Casado. El PP es fruto de su historia, con sus errores y muchos aciertos, pero estoy orgulloso del servicio que han hecho ambos a España. Lógicamente me quedo con la etapa de Rajoy porque participé directamente como diputado.

-¿Y cómo se ve allí al PPdeG?

-Con envidia. Llevamos tres mayorías absolutas y la estabilidad es un valor importante. Si se refiere a las relaciones, la de Casado y Feijoo es estupenda, como la de Teodoro García Egea y Miguel Tellado. ¡Y la mía con los cuatro!

-Entonces, ¿por qué son noticia los desencuentros de los líderes?

-Eso es más una cosa de los medios de Madrid que de la realidad. Los veo juntos y la sintonía es total, más allá de que en un partido pueda haber diferentes opiniones. Hay intereses por buscarle tres pies al gato, pero pinchan en hueso.

-Coinciden desde luego en pedir los votos a los que apoyaron a Ciudadanos y Vox en abril.

-Es que solo hay dos posibilidades, una liderada por Sánchez, que no quiere saber nada del PP y que prefiere la opción Frankenstein; o la alternativa liderada por Casado, que necesita agrupar el voto de centroderecha allí donde Ciudadanos y Vox no tienen representación. En Galicia hubo 80.000 votos a Vox que no sirvieron para nada, es como si todo el censo de la ciudad de Lugo no hubiera votado.

-¿Por qué no cuajó España Suma?

-Era una idea bonita. Todas las encuestas nos situarían ahora cerca de la mayoría. Pero hubo egoísmo por sacar un par de escaños más o por desgastar al PP. Eso lo puede corregir cada ciudadano en las urnas el domingo.

-¿Le hubiera gustado algún anuncio de Sánchez sobre Alcoa?

-Hablamos del mayor problema de una comarca donde viven 70.000 personas, la amenaza es seria.

-¿Qué problema solventaría primero en Galicia?

-Arreglaría la situación de la industria, porque significa empleo y es el futuro de las personas. Pero la relación de agravios es tan amplia y en tan poco tiempo que me asusta que Sánchez pueda estar cuatro años a pleno rendimiento. Es cierto que ha estado algo maniatado, menos de lo que dice, pero no ha hecho nada por Galicia.

-Tiene el diagnóstico, pero ¿qué solución ve para Alcoa?

-Feijoo ha promovido un borrador para las electrointensivas con seis medidas que hacen que el precio de la luz baje. Ese documento está en el Ministerio y la respuesta fue silencio. Detrás hay una cuestión de actitud. En el 2016, Rajoy fue a Nueva York para reunirse con el presidente mundial de Alcoa y se arregló el problema. Sánchez fue hace unos días y no se reunió con nadie, se dedicó a hablar de Franco.