La campaña electoral de la A a la Z

Efe

ELECCIONES 2016

Estas semanas previas a las elecciones han sido intensas, diferentes y con muchos más actores de los habituales

19 dic 2015 . Actualizado a las 01:15 h.

La campaña electoral ha sido intensa, distinta y con más actores de los habituales. Ahora que termina pueden resumirse sus claves de la A a la Z:

A de Audiencias. Si todavía alguien duda de que el interés por la política ha aumentado en España o de que estas elecciones son las que más expectación despiertan en décadas, no tiene más que mirar las cifras de las audiencias televisivas: 9,6 millones vieron el cara a cara entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez y 9,2 millones la contienda a cuatro. Ni que fueran partidos de fútbol.

B de Bertín. Y como los políticos saben que nuestro pasatiempo favorito es la televisión, todos han tratado de colarse en los hogares españoles de cualquier forma posible. Aunque para ello tuviesen que jugar al futbolín -Mariano Rajoy- o al ping-pong -Pedro Sánchez- en la casa de Bertín Osborne, o tocar la guitarra, como la tocó Pablo Iglesias, en el programa de María Teresa Campos.

C de Constitución. La que todos los partidos, salvo el PP, quieren cambiar para adaptarla a los nuevos tiempos. Blindar los derechos sociales y reformar el sistema electoral son algunas de las propuestas, entre las que también figuran propuestas contradictorias: descentralizar, hasta incluso aprobar un referéndum en Cataluña (Podemos) frente a recuperar competencias para el estado (Ciudadanos y UPyD).

D de Debates. Un debate a dos, otro debate a cuatro, otro a tres, otro a nueve... Debates televisivos, radiofónicos, en las redes sociales... No hay duda de que los debates electorales en múltiples formatos han llegado a España, por fin, para quedarse. Aunque ha habido quien, como el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha preferido ceñirse al tradicional cara a cara, y se ha llevado, por ello, las críticas de todos los demás.

E de Ejército. Inédito en estas elecciones ha sido el salto a la arena política de un exjefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el general Julio Rodríguez -número dos de Podemos por Zaragoza-, aunque de momento los sondeos no le dan escaño; está por ver si lo consigue la comandante retirada Zaida Cantera (sexta del PSOE por Madrid).

F de Fondona. Hay algunos que aún no se han enterado de lo caro que sale, en esta era de las redes sociales, faltar al contrario. Sobre todo si lo hacen con mal gusto. Es lo que le ocurrió al concejal del PP de Galapagar que llamó «fondona» a la portavoz municipal de Ciudadanos en Madrid, Begoña Villacís y recibió como respuesta vídeos de políticos y ciudadanos comiendo sin parar y proclamándose todos fondones.

G de GonzálezFelipe González es el gran referente del socialismo para Pedro Sánchez. El líder socialista quiere ser Felipe, mientras sus rivales, sobre todo el PP, se empeñan en identificarle más como un nuevo Zapatero.

H de Hipster. Aunque en el PP admiten que la campaña electoral de Rajoy, centrada en los pueblos y en los paseos, se ha diseñado pensando mucho en llegar a los pensionistas, los populares también han buscado a los jóvenes con iniciativas como los vídeos de los «hipsters» o los moteros. Un esfuerzo original, aunque también muy parodiado, para quitarse algunas etiquetas y tratar de identificarse con una juventud que, según las encuestas, está mirando hacia otros partidos.

I de Indecente. La palabra de la polémica que le soltó el líder socialista, Pedro Sánchez, al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy en el cara a cara televisado entre ambos a cuenta de la corrupción en su partido. Fue uno de los momentos más broncos de la campaña y motivó que el jefe del Ejecutivo acusara al candidato del PSOE de ser ruin, mezquino y miserable.

J de Jueces. Esta ha sido la campaña de los fichajes «estrella», puesto para el que han opositado varios jueces, Juan Pedro Yllanes y Victoria Rosell (Podemos) o Dolores Galovart (PSOE); aunque el más polémico ha sido la incorporación de la exdiputada de UPyD Irene Lozano a las filas socialistas. También procedente de UPyD es el actor Toni Cantó que se incorporó a las listas de Ciudadanos en Valencia, mientras que Juan Pablo Wert, hermano del exministro de Educación, será candidato de Podemos.

K de Kilómetros. Es difícil hacer un cálculo de las distancias que han recorrido los candidatos a presidente del Gobierno en esta campaña electoral, pero todos ellos llevan miles de kilómetros a sus espaldas, más de 10.000 por cabeza, en un periplo que les ha llevado a todos los rincones del país en su afán por arañar hasta el último voto que pueda llevarles a la Presidencia.

L de Lemas. Todos los partidos han intentado resumir su oferta a los españoles en su lema de campaña. La «España, en serio», que ofrece el PP; la nueva etapa política que quiere abrir «Con ilusión» Ciudadanos; El «Futuro para la mayoría» con que el comenzó hace quince días el PSOE y que ha evolucionado a «Un presidente para la mayoría; y «Un país contigo», el que quiere construir Podemos. «Por un nuevo país» apuesta, por su parte, Unidad Popular-IU.

M de Menina. Nombre de la «operación» con la que Pablo Iglesias bautizó la supuesta estrategia del PP para hacer presidenta a Soraya Sáenz de Santamaría si logra con ello el apoyo de Ciudadanos.

N de Nueva (Política). Antes de las elecciones ya han cambiado muchas cosas. Tanto que la partida ya no parece jugarse entre izquierda y derecha, sino entre lo nuevo y lo viejo: la tradición bipartidista de PP y PSOE frente a la modernidad que venden Ciudadanos y Podemos.

(Contiene la Ñ) en España y Cataluña. En contra de lo esperado, el debate soberanista catalán no ha copado esta campaña electoral, aunque los candidatos no se hayan olvidado del todo del asunto. Habrá que esperar a las urnas para ver qué representación tienen los independentistas en el Congreso y qué gobierno central será el encargado de bregar con este asunto.

O de Olvidar. Es lo que Pablo Iglesias pidió a los ciudadanos que no hicieran en el debate electoral con PSOE, PP y Ciudadanos. Que no olviden las tarjetas black, ni la Púnica, ni la Gürtel, ni «Luis, sé fuerte», ni «la estafa de las preferentes». Y es que la corrupción ha centrado la mayor parte de las críticas a Mariano Rajoy por parte de sus adversarios.

P de Puñetazo. Fue en su último paseo de esta campaña, y encima en su ciudad, Pontevedra, donde Mariano Rajoy sufrió la agresión de un joven, un brutal puñetazo en el lado izquierdo de la cara que le hizo incluso tambalearse. La condena fue unánime y las muestras de solidaridad vinieron de todos y cada uno de sus rivales. Él, sin gafas y con la cara marcada, continuó su campaña.

Q de Queso. Va a ser difícil repartir las porciones en el nuevo Parlamento. Las encuestas siguen sin dibujar un panorama claro y solo coinciden en que el PP ganará las elecciones pero que necesitará «más queso». Entre el segundo y el cuarto todo puede pasar.

R de Remontada. Objetivo que se había marcado Podemos en esta campaña y que se ha convertido en el grito más coreado por los simpatizantes en los mítines de Pablo Iglesias. La formación morada da por hecho que ha conseguido ganar a las encuestas que le dejaban fuera del podio hace quince días.

S de Suárez. Mariano Rajoy viajó a Ávila en su primera jornada de campaña para reivindicar la figura de Adolfo Suárez junto al hijo del expresidente, y pedir el consenso en los asuntos de Estado. Más intenso ha sido Albert Rivera en sus alusiones a Suárez: le cita continuamente en sus mítines y recurre a su legado para pedir el voto.

T de Tripartito. El PP empezó la campaña advirtiendo constantemente del riesgo de un posible tripartito entre el PSOE y los dos partidos emergentes que le prive del Gobierno, pero la ha terminado poniendo el foco en un acuerdo entre los socialistas y Podemos. Albert Rivera, en cualquier caso, no se cansa de asegurar que Ciudadanos no apoyará a nadie si no es primera fuerza política.

U de Unidad Popular. Esa unión por encima de las siglas que buscaban al principio todos en la izquierda y que al final se ha quedado reducida a la nueva marca de Izquierda Unida con Alberto Garzón al frente. Era otra la confluencia que buscaba Podemos, que fía su triunfo en buena medida a sus alianzas territoriales en Cataluña, Galicia y Valencia.

V de Victoria. Es lo que persiguen todos en las elecciones. A todos los candidatos les gritan »presidente, presidente« en sus mítines, aunque esta vez está menos claro que nunca quién de ellos se instalará en La Moncloa.

(Contiene la W) en Pricewaterhousecoopers. No habría aparecido esta consultora internacional en la campaña si no fuera porque Pablo Iglesias la rebautizó en un debate electoral como Housewaterwatchcoopers. Sólo unos minutos después alguien ya había creado en la red con mucha sorna ese dominio.

(Contiene la X) en Experiencia. El PP se lo ha jugado todo a la experiencia de su candidato para desacreditar a los jóvenes rivales que quieren su puesto en La Moncloa. Mariano Rajoy no para de decir que para presidir el Gobierno hay que ir aprendido y haber sido, al menos, concejal.

Y de Yihadista. El terrorismo yihadista se ha colado en esta campaña, primero con la cercanía de los atentados de París y después con la muerte de dos policías españoles en Kabul. Todos los partidos aseguran estar unidos en esta lucha aunque son distintas las estrategias que proponen para afrontarlo.

Z de Zafarrancho. Termina una legislatura y empieza otra e incluso el Congreso se prepara para recibir a muchos nuevos diputados y un mayor número de grupos parlamentarios. Esperemos que este zafarrancho no acabe siendo de combate y nuevos y viejos aprendan a vivir en armonía en la casa de todos.