La división en el Parlamento vasco bloquea la elección de su presidente

La Voz

ESPAÑA

El PNV mantiene a Atutxa como candidato, que empató a votos con el socialista Miguel Buen Una diputada nacionalista a punto de dar a luz puede dejar a su partido en minoría.

16 may 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

La división política en el Parlamento vasco se puso ayer de manifiesto en el primer pleno de la legislatura, que tuvo que ser suspendido al quedar bloqueada la elección del presidente de la Cámara. Los dos únicos candidatos a ocupar el puesto, el peneuvista Juan María Atutxa y el socialista Miguel Buen, empataron a 33 papeletas después de tres votaciones. Atutxa fue apoyado por la coalición PNV-EA, por Ezker Batua y Aralar, y Buen por PSE y PP, mientras que el Partido Comunista de las Tierras Vascas votó en blanco. La sesión constitutiva comenzó con la toma de posesión de sus escaños por parte de los parlamentarios, un acto simbólico pero que esta vez despertó enorme expectación, ya que suponía el regreso de los representantes aberzales al legislativo autónomo. Precisamente, las diputadas y diputados del PCTV fueron los primeros en entrar en el salón de plenos, al haber sido también los más diligentes en acreditarse hace algunas semanas. A la sesión asistieron, desde la tribuna del público, Begoña Errazti, Josu Jon Imaz, José Antonio Ardanza, Iñaki Anasagasti, Javier Rojo y Rakel Peña, de Batasuna, que acudió invitada por Nekane Erauskin e incluso despachó con ella en la oficina parlamentaria del PCTV. La primera vuelta de la elección de presidente se saldó con sorpresa, ya que Aralar votó en blanco, dejando a Atutxa con un voto menos que Buen (32 por 33). La diputada Aintzane Ezenarro justificó posteriormente su decisión por la necesidad de buscar acuerdos entre las diferentes formaciones, a las que acusó de «no hacer un esfuerzo suficiente» para que la mesa de la Cámara sea representativa. Como ninguno de los aspirantes obtuvo mayoría absoluta (38 votos) se pasó una segunda vuelta, en la que los únicos sufragios en blanco fueron los nueve del PCTV. De nuevo, ni Atutxa ni Buen consiguieron el apoyo de la mitad más uno de los parlamentarios (empataron a 33), por lo que el reglamento de la Cámara estipulaba que debía procederse a una tercera ronda que se decidiría por mayoría simple. La igualdad se mantuvo y la presidenta de la mesa de edad (el órgano que gobierna la Cámara provisionalmente) suspendió la sesión. Hoy volverá a repetirse el proceso, pero las posiciones están tan enrocadas que no será fácil desbloquear la situación. El PCTV asegura que dará su apoyo a cualquier candidato del PNV que no sea Atutxa, pero la formación nacionalista mantiene su confianza en el ex consejero de Interior del Gobierno vasco, y defiende su posición de partido más votado en las elecciones. Así lo explicaba ayer a La Voz su presidente, Josu Jon Imaz: «Nosotros no contemplamos en absoluto cambiar de candidato», y apostillaba que «a lo mejor es el PSE el que retira el suyo...». De esta forma, lo más factible es que hoy se produzca la renuncia de uno de los dos aspirantes. Que lo haga Atutxa motu proprio es bastante improbable, según reconocían fuentes de su partido. Mientras que, en el caso de Buen, podría ser un peaje a cambio de que el PNV apoye hoy al Gobierno de Zapatero en el pleno del Congreso que decidirá sobre su petición de abrir un diálogo con ETA. Una embarazada, clave Pactos aparte, los nacionalistas siguen con una mezcla de guasa y preocupación el estado de su diputada Eider Mendoza, en avanzado estado de gestación y cuyo puesto no puede ser ocupado por otra persona. Su ausencia, en caso de dar a a luz, permitiría a Miguel Buen hacerse con las riendas de la Cámara por mayoría simple. La situación creada en el Parlamento vasco ha obligado al lendakari en funciones, Juan José Ibarretxe, a suspender el viaje que tenía previsto hacer los próximos jueves 19 y viernes 20 a la ciudad polaca de Wroclaw, donde iba a intervenir ante la cumbre europea de regiones y ciudades.