La polémica agrava la tensión entre el PNV y el Ejecutivo tripartito El lendakari aclarará su iniciativa sobre el referendo dentro de unos meses
16 jul 2007 . Actualizado a las 07:00 h.El artículo del presidente del PNV, Josu Jon Imaz, en el que desaconsejaba la celebración de una consulta popular sobre el futuro del País Vasco provocó ayer una rotunda respuesta del Gobierno vasco. La portavoz del Ejecutivo de Ibarretxe, Miren Azkárate, recordó que pulsar la opinión vasca es una de las promesas recogidas en el acuerdo del Gobierno tripartito y anunció que será el propio Ibarretxe quien explique «las iniciativas políticas» en unos meses. Imaz se había posicionado en contra del referendo al entender que ETA podría aprovecharlo para justificar su vuelta a la violencia. Pero el consejero vasco de Justicia y Trabajo y miembro de Eusko Alkartasuna, Joseba Azkarraga, rebatió también ese argumento. «¿Si hay consulta, ETA va a asesinar en función del resultado de esa consulta?», preguntó. Azkárraga afirmó que con su actitud, Imaz «está trasladando a la sociedad vasca los problemas que tiene en su propio partido». Imaz recibió, sin embargo, el apoyo del secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, que valoró positivamente que el líder del PNV apueste «por un acuerdo entre diferentes para construir país». Desde el PP vasco, su secretario general, Carmelo Barrio, afirmó que la polémica demuestra la crisis interna del PNV. Fuentes cercanas a Imaz recordaron ayer que el acuerdo del tripartito vasco especifica que el referendo se produciría en un «escenario de ausencia de violencia y sin exclusiones».