Los pescadores gaditanos navegarán hoy hasta el lugar donde el Peñón lanzó los bloques de hormigón para reclamar su derecho a faenar
18 ago 2013 . Actualizado a las 13:55 h.Todos estaban ayer pendientes de la anunciada conversación telefónica entre el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso. Pero nadie esperaba resultados, o al menos que sirva para reconducir a corto plazo la enésima crisis sobre Gibraltar. Por eso, los pescadores gaditanos mantienen la protesta convocada para esta mañana para conseguir que puedan volver a faenar en las aguas de la bahía. Y, por eso también, el Gobierno británico, que entiende que los intentos de diálogo han sido infructuosos, ultima una serie de medidas de presión que podrían incluir, además de acciones legales, otras como el veto a políticas comunitarias que interesen a España e incluso la elección de representantes españoles en órganos de la UE.
La idea inicial del gabinete de David Cameron es plantear una demanda contra España ante el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo en base a la supuesta vulneración de la libre circulación de los ciudadanos. Para ello, como anunció Cameron a Barroso, las autoridades británicas están acumulando pruebas del, en su opinión, carácter desproporcionado de los controles de tráfico en la verja. Los británicos entienden que Rajoy se había comprometido, en la conversación telefónica que mantuvo la semana pasada con el primer ministro, a cuando menos suavizarlos.
Contrabando
El Gobierno español, por el contrario, asegura que jamás ha adquirido compromiso alguno sobre unos controles que considera legales, proporcionados e irrenunciables. El argumento es que está obligado a controlar las fronteras exteriores de la Unión Europea, de las que forma parte la verja con Gibraltar, ya que este territorio no forma parte del espacio Schengen.
Por si quedaban dudas, el ministro del Interior destacó el viernes que Gibraltar es, además, la frontera del contrabando. Y puso ejemplos contundentes, como que en el Peñón importaron el año pasado 140 millones de cajetillas de tabaco, una cifra que supera con mucho las necesidades de consumo de su población, próxima a los 30.000 habitantes, y de los visitantes. Y es una actividad en aumento, como demuestra que en los siete primeros meses del presente año se hayan incautado en la frontera tantas cajetillas de tabaco, 725.000, como en todo el 2012. Así que los controles continuarán y, con ello, las colas de vehículos. A primer hora de la mañana de ayer la demora en atravesar la frontera superaba ya las dos horas. Y la situación empeoró a lo largo del día.
Apoyo crítico del PSOE
Los socialistas, que apoyan la posición de fondo del Gobierno español, no comparten la forma en que está gestionando esta nueva crisis. En este sentido, el exministro y portavoz de los socialistas españoles en el Parlamento Europeo Juan Fernando López Aguilar recordó ayer que «Gibraltar está excluido del territorio europeo, pero sus habitantes son británicos y tienen derechos y obligaciones conforme al Derecho europeo». Por eso, instó al Gobierno a buscar alianzas en las instituciones comunitarias para hacer valer su posición. El secretario para la UE del PSOE, Juan Moscoso, pidió al Gobierno que entable ya conversaciones directas con los británicos y deje de hablar a través de los medios o, como dijo el secretario de Organización, Óscar López, juegue con «propuestas ridículas» como una hipotética alianza con Argentina para plantear una vez más en Naciones Unidas el asunto de la descolonización del Peñón.
En esas están los pescadores gaditanos, que quieren que «los gobiernos discutan lo que deban, pero que a nosotros nos dejen buscarnos la vida», en palabras de Leoncio Fernández, patrón mayor de la cofradía de pescadores de La Línea. Por ello, unas 80 embarcaciones están convocadas a las 10 de la mañana de hoy para navegar en protesta desde Puerto Chico, de La Línea, hasta la zona donde Gibraltar lanzó los 70 bloques de hormigón.