Interior prestará atención especial a asesinos en serie y violadores excarcelados

A. A. madrid / colpisa

ESPAÑA

24 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Pese a la alarma que puede causar la excarcelación en breve de numerosos presos de ETA a raíz de la decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de anular la aplicación de la doctrina Parot, el mayor peligro para la seguridad pública radica, según el Ministerio del Interior, en la libertad de decenas de asesinos reincidentes y violadores en serie a los que también se aplicó esa fórmula de calcular las penas de cumplimiento efectivo.

Al igual que los terroristas, estos delincuentes verán como su «responsabilidad penal queda extinguida por cumplimiento de condena». Es decir, las fuerzas de seguridad no podrán tener sobre ellos ningún control preventivo, como la libertad vigilada, que sí podrá aplicarse a aquellos que hayan sido condenados a partir del 2010 en aplicación del nuevo Código Penal. A pesar de esta delicada situación, desde el Ministerio del Interior se aseguró que se mantendrá una especial atención sobre este tipo de condenados para garantizar el cumplimiento de la ley y la seguridad, y evitar situaciones de riesgo ante el temor de que algunos de estos criminales, no rehabilitados, vuelvan a delinquir cuando recuperen la libertad.

Hasta 37 presos peligrosos

No se avanzó, en cambio, qué tipo de medidas serán. Hasta el momento se había aplicado la doctrina Parot a quince violadores o asesinos en serie que pueden quedar en libertad de inmediato, y en los próximos cinco años saldrán de prisión otros hasta sumar 37 en la misma situación. Desde Interior se da por hecho que los etarras que sean excarcelados no retomarán la violencia al haber cesado ETA los atentados. Sin embargo, se cuenta con que muchos de los agresores sexuales y psicópatas liberados, en la mayoría de los casos diagnosticados con trastornos mentales, sí podrían volver a actuar al no encontrarse rehabilitados. Muchos de ellos saldrán de prisión con edades entre los 40 y 50 años, lo que supone mayor riesgo que si tuvieran edades más avanzadas.

Entre los reclusos que saldrán en libertad están Juan Manuel Valentín, que violó y asesinó a una niña de nueve años; Pablo Manuel García, condenado a 1.700 años por 80 agresiones sexuales; o Miguel Ricart, autor del triple asesinato de las niñas de Alcácer, por el que se le impuso una pena de 170 años de cárcel.