Rosa Isela Guzmán asegura que políticos mexicanos aceptaron donaciones del narcotraficcante para sus campañas electorales
04 mar 2016 . Actualizado a las 17:54 h.El narcotraficante mexicano Joaquín «El Chapo» Guzmán estuvo en dos ocasiones en Estados Unidos tras la fuga que protagonizó en julio del 2015, según reveló este viernes la hija mayor del capo, Rosa Isela Guzmán Ortiz.
En una entrevista que publica el diario británico The Guardian, Guzmán Ortiz asegura que funcionarios mexicanos ayudaron a su padre a cruzar la frontera para visitar a familiares, tras escapar del penal de máxima seguridad de El Altiplano, en el Estado de México, a través de un túnel de 1,5 kilómetros.
La hija del narcotraficante, que se convirtió entonces en uno de los fugitivos más buscados del mundo, señala en su primera entrevista con un medio de comunicación que políticos mexicanos aceptaron donaciones de El Chapo para sus campañas electorales, lo que le sirvió, según su versión, para facilitar su huida.
«Mi padre no es un criminal. Es el Gobierno el que es culpable», dijo Guzmán Ortiz, de 39 años, que mantuvo diversas conversaciones con periodistas de The Guardian con el beneplácito de El Chapo, de 61 años.
La hija del líder de uno de los sindicatos de la droga más lucrativos del mundo comenta que su padre estuvo a finales del 2015 en su casa de California (EE.UU.), donde vive con sus cuatro hijos. «El Chapo» mantiene diversos lazos familiares en Estados Unidos, país natal de su tercera esposa, la antigua reina de la belleza Emma Coronel. Guzmán Ortiz no desvela en la entrevista detalles de cómo «El Chapo» logró cruzar la frontera estadounidense sin ser detectado. «Yo le pregunté lo mismo, créame. Lo único que sé es que mi padre le encargó a su abogado que entregara algunos cheques para campañas (políticas) y pidió que se le respetara», señala, al tiempo que indica que su familia está considerando publicar copias de esos cheques junto con los nombres de funcionarios y políticos que los aceptaron.
«Si hay un pacto, no lo respetan. Ahora que lo han capturado dicen que es un criminal, un asesino. Pero no decían eso cuando pedían dinero para sus campañas. Son unos hipócritas», asevera la hija del traficante.
Al día siguiente de la fuga de «El Chapo», el presidente de México, Enrique Peña Nieto, tachó lo sucedido como una «afrenta» para el país y anunció una «investigación a fondo para determinar si ha habido servidores públicos en complicidad o involucrados» en la huida.
La Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA) ofreció una recompensa de 4,5 millones de euros por cualquier información que condujera a su captura. A principios de enero, el narcotraficante fue detenido en Sinaloa, en el noreste de México, una de las cunas del tráfico de drogas en Norteamérica. «El Chapo» había logrado notoriedad internacional con una primera fuga de prisión en el 2001, cuando huyó de la cárcel de Puerto Grande, en Guadalajara, oculto en un carro de la lavandería.
En aquella ocasión permaneció más de una década en paradero desconocido para las autoridades, que le capturaron en febrero del 2014, también en Sinaloa.
La familia y los abogados anuncian una huelga de hambre
Familiares y abogados del narcotraficante Joaquín «El Chapo» Guzmán iniciarán una huelga de hambre enfrente del penal donde está recluido el capo para denunciar la supuesta violación de sus derechos, confirmaron a Efe sus abogados.
Uno de los defensores del líder del cártel de Sinaloa, Juan Pablo Badillo, detalló que la huelga de hambre iniciará ese viernes a las 12.00 hora local (18.00 GMT) frente al penal del Altiplano, en el municipio de Almoloya de Juárez. En esa penitenciaría del Estado de México, vecino de la capital, se encuentra preso «El Chapo» después de que fuera detenido de nuevo el pasado 8 de enero. «A mí me convocaron con la intención de que estemos ahí los abogados y que haya familia del señor, gentes y simpatizantes», afirmó el letrado, quien explicó que es «muy posible» que entre los huelguistas se encuentre la esposa del capo, Emma Coronel.
El motivo de esta protesta es «evitar que se siga torturando en la forma tan cruel y sanguinaria en que lo están haciendo las autoridades carcelarias», señaló. Según los letrados, «El Chapo» no puede dormir porque en la noche es despertado al menos una vez para obtener una «prueba de vida», una situación que le hace sentirse «un zombi».
No obstante, el jefe de prisiones federales de México, Eduardo Guerrero, negó el martes que se violen sus derechos humanos y aclaró que se le despierta cada cuatro horas para pasar lista acorde con el protocolo, pues el narcotraficante no está «en un spa». El pasado 15 de febrero, en la única visita que pudo realizar Badillo al capo, este le hizo saber que era «una situación definitivamente insoportable que estaba minando su salud al no permitirle dormir», añadiendo que le pasaban revista cada dos horas durante la noche y cada hora durante el día. Dicho encuentro fue de 25 minutos y con la presencia de un elemento de seguridad enmascarado ubicado a unos 80 centímetros de distancia, según Badillo.
Asimismo, otro de los abogados del criminal, José Luis González Meza, explicó que la huelga de hambre comenzará este mediodía, aunque puede que algunos de los familiares se sumen más tarde porque vienen del noroccidental estado de Sinaloa, donde residen. Badillo confirmó que el Chapo pidió a sus abogados acelerar el proceso de extradición a Estados Unidos.