El presidente de la Xunta participó en la manifestación de Colón y recordó que muchos dirigentes históricos socialistas están de acuerdo con el líder del PSOE. Torra aprovecha el «fracaso» de la manifestación para pedir a Sánchez que vuelva a negociar
10 feb 2019 . Actualizado a las 16:38 h.El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, llegó a la plaza de Colón poco antes de la hora prevista para el arranque del acto. Venía directamente de Nueva York. «He llegado hace 25 minutos, para que se vea que Iberia y el viento de cola han funcionado perfectamente», bromeó. No dejó lugar para las sonrisas, sin embargo, a la hora de valorar los motivos por los que secundó la concentración.
De hecho, tras criticar con dureza la idea de usar un relator, el líder de los populares gallegos recordó que esa no es solo la opinión de las formaciones conservadoras, sino que la comparten «a maioría dos dirixentes socialistas que tiveron responsabilidades de Goberno», señaló, en referencia a Felipe González o Alfonso Guerra. «O criterio é coincidente. Polo tanto, sin reaccións desmesuradas, sin crispacións, o que vimos pedir aquí é dignidade para a xente, dignidade para o pobo, porque a soberanía nacional non se pode negociar, non lle corresponde ó goberno de turno, correspondelle as Cortes Xerais».
Cargó contra la falta de escrúpulos de Pedro Sánchez para mantenerse en en el Gobierno a cualquier precio: «Non ten límites para manterse na Moncloa. Pero non se pode facer de todo e sen límite». Aseguró que los Presupuestos Generales del Estado, pese a ser importantes, lo son «moitísimo menos que a soberanía do pobo español. Non poden estar por riba dos intereses de todos os españois. E se todos os españois importamos menos que que un español siga sendo presidente do Goberno, entón é que ese presidente está completamente equivocado».
También salió al paso de las voces que en Galicia criticaron su presencia en la movilización ciudadana de esta mañana. «Eu son o representante ordinario do Estado en Galicia, polo tanto estou representando a Galicia e non podo estar calado ante a falta de respeto que supón para Galicia esa mesa de negociación na que se están tratando cousas que nos afectan». El presidente subrayó que «con tranquilidade e sosego mostramos a nosa repulsa», ya que -insistió- ningún presidente tiene legitimidad para negociar lo «innegociable, que é a soberanía nacional».
Se mostró convencido de que Sánchez ya ha escuchado el clamor de la sociedad, alegando que la prueba es que ya ha cambiado su mensaje, aunque no haya ocurrido lo mismo con su voluntad, que es la de mantenerse en la presidencia «a calquera prezo, custe o que custe».