Casado y Abascal atacan al presidente con la mentira, los indultos y su breve paseo con Joe Biden
16 jun 2021 . Actualizado a las 12:12 h.La mentira, los indultos a los presos secesionistas y su breve encuentro con el presidente estadounidense, Joe Biden, coparon las preguntas al presidente del Gobierno en la sesión de control de este miércoles a la que se sometió el Ejecutivo en el Congreso. Abrió fuego Pablo Casado al rescatar unas palabras de Sánchez de hace unos años en las que pedía «acabar ya con los indultos», al carecer de «sentido que un político indulte a otro», una cuestión que al secretario general del PSOE le provocaba entonces «vergüenza».
El presidente del PP le recriminó que a pesar de que «miente siempre», con las medidas de gracia «no se puede caer más bajo», argumentando que la única explicación a este cambio es la «ambición patológica de poder» de Sánchez.
Casado ironizó con el efímero paseo que Sánchez y el presidente estadounidense mantuvieron en un pasillo de la sede de la OTAN en Bruselas, al que se refirió como un «penoso monólogo que causó vergüenza ajena en todo el mundo», dijo. «Para contestar esta pregunta tiene cinco veces más tiempo que incluso para perseguir a Biden», bromeó, provocando las risas de su bancada.
Aupado por las últimas encuestas que lo sitúan como la formación política con más apoyos en caso de una nueva convocatoria electoral, Casado pareció apuntar a la Moncloa cuando para concluir su turno de palabra realizó una parada antes de advertirle al presidente del Gobierno: «Aproveche su tiempo, no le queda demasiado».
Sánchez replicó al líder de la oposición acusándole de una falta de concordancia entre lo que predican y lo que realizan. «No paran de dar lecciones de constitucionalismo. Dicen que son el partido que más defiende la unidad de España, pero bloquean la renovación del CGPJ; dicen que defiende la igualdad entre españoles, pero nos dividen entre buenos y malos», lamentó. El jefe del Ejecutivo también recurrió al escarnio al rescatar las palabras de la presidenta de Madrid en los preámbulos de la manifestación de Colón en las que puso en entredicho si el rey firmaría o no los indultos. «Manda a la señora Ayuso a decir incongruencias», comentó.
El secretario general socialista reivindicó que su Gobierno defiende la unidad de España y la Constitución, «y no de palabra, con datos», recordando a Casado que con el PP en el poder se celebraron «dos referendos ilegales» y el parlamento catalán «declaró unilateralmente la independencia». «No vamos a utilizar para dividir a los españoles ni la Constitución, ni la bandera, ni», en lo que sonó como un nuevo recado a Ayuso, «a la monarquía, como ustedes sí hacen», denunció.
Mano a mano con Abascal
El siguiente mano a mano de Sánchez durante la sesión de control fue con el presidente de Vox, Santiago Abascal, que para intentar hacer mella recurrió a los mismos temas que Casado: la mentira, los indultos y el encuentro con Biden, aunque este con el punto más de agresividad que lo caracteriza. «¿Hasta dónde está dispuesto a llegar para mantenerse en el poder?», inició su intervención Abascal, explicando que en realidad se trataba de una pregunta «retórica», por haber «demostrado» que hará «lo que haga falta».
Abascal recordó el pacto de gobierno con Podemos que tantas veces negó en campaña, pero también que «repitió hasta cinco veces que no pactaría con Bildu, y hoy tienen un Gobierno y unos Presupuestos gracias a ellos», y hasta «sus portavoces se sacan fotos con ellos», una imagen que no consideró «compatible» con la de Sánchez visitando la recreación del zulo en el que Ortega Lara sobrevivió al secuestro de ETA. «No tienen ni freno ni escrúpulos».
Respecto a los indultos, Abascal acusó a Sánchez de haber «traicionado al rey, al Supremo y al conjunto de los españoles que cumplen las leyes», al tratarse de una medida de gracia «injustificada», ya que los líderes secesionistas no solo «no han podido perdón», sino que han manifestado su voluntad de «volver a delinquir». «Le prestamos los siete segundos para su próxima cumbre bilateral, que seguro que los aprovecha bien», ironizó.
Sánchez, tras agradecer las «constructivas y positivas intervenciones» de su adversario político, acusó a Vox de tener una «visión de España» en la que «solo caben ustedes y sus compañeros de viaje del PP». El presidente del Gobierno afirmó que «la España constitucional es todo lo contrario a lo que ustedes representan», acusando a la formación de Abascal de ser «los herederos de aquellos que añoran el Franquismo. Aquí hay personas que son hijos y nietos que han defendido la democracia. Esa es la gran diferencia entre ustedes y nosotros. Nosotros reivindicaremos la España que mira hacia adelante y no la España en blanco y negro que ustedes reivindican», concluyó.