Marimar Blanco, hermana del concejal asesinado por ETA en julio de 1997, exige a Sánchez que sea valiente y rompa con el partido de Otegi
10 jul 2022 . Actualizado a las 13:05 h.El presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, se comprometió este sábado a derogar «la mal llamada Ley de Memoria Democrática», un episodio «indigno» de la democracia española porque «los testaferros del terrorismo de ETA son quienes dictan los términos» de la norma. «Nos provoca profunda repugnancia», dijo, antes de prometer que buscará los votos «del próximo PSOE para que juntos restablezcamos a memoria y la justicia».
Feijoo participó en la clausura de la Escuela Miguel Ángel Blanco, organizada por los populares en la fecha simbólica en la que se cumplen 25 años del asesinato del joven concejal de Ermua. En la plaza San Pelayo de la localidad, el líder del PP cargó contra el PSOE y los pactos con EH Bildu, convertido en uno de los socios preferente de la legislatura. Y en concreto contra el acuerdo para sacar adelante la Ley de Memoria Democrática, que llegará al Congreso el próximo jueves para su aprobación definitiva.
Esta norma se ha convertido en el nuevo elemento de presión de los populares contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. La ley está en el centro de la polémica después de que el Ejecutivo haya atado el apoyo de EH Bildu a cambio de ampliar de 1978 a 1983 el período para investigar vulneraciones de derechos humanos con el objetivo, según la coalición soberanista, de cuestionar la primera etapa de los GAL con Felipe González en la Moncloa. Asimismo, pone en solfa el relato de la Transición.
A lo largo de su intervención, Feijoo apeló a «aquel PSOE», el que estaba junto a los populares cuando el terrorismo asesinaba a concejales de ambos partidos. También al PSOE de la Transición, etapa que Feijoo ensalzó varias veces.
En el acto también tomó la palabra el expresidente del Gobierno José María Aznar, jefe del Ejecutivo «en aquellos días infames» del secuestro y asesinato de Blanco. Su intervención fue en la misma línea: reivindicar la memoria del joven edil y cargar contra el apoyo de Bildu a la Ley de Memoria Democrática: «Ni una sola coma que hubieran puesto en una ley que habla de memoria sería aceptable. Y no lo será», afirmó.
«Hablaré, claro que hablaré, para que nadie pueda blanquear el terrorismo». Marimar Blanco insistió ayer en el homenaje que el PP tributó en Ermua a su hermano Miguel Ángel que, aunque «se ha intentado silenciar la voz de las víctimas» al excluir en principio su intervención del gran acto institucional que se celebrará hoy en su localidad natal con la presencia del rey y del presidente del Gobierno, «no lo han conseguido». «La voz de los inocentes es más fuerte que cualquier interés partidista», proclamó la también diputada del PP en la Asamblea de Madrid.
«Insulto a las víctimas»
Y con esa voz y esa legitimidad que defendió para pronunciarse, la exparlamentaria vasca apeló directamente a Pedro Sánchez para que sea «valiente» y aproveche su intervención en el polideportivo que lleva el nombre de su hermano para «romper» con EH Bildu. De hecho, Blanco, que se emocionó durante el acto, lamentó que, un cuarto de siglo después, quede «muy poco» del espíritu de Ermua, la rebelión cívica contra el terror que espontáneamente nació tras el secuestro y asesinato del joven concejal.
En ese sentido, se preguntó «cómo es posible» que Sánchez no sea consciente de que «cualquier negociación con EH Bildu se convierte en un insulto a las víctimas, a su memoria y su dignidad». «No podemos olvidar que ahora serán legales pero mantienen una trayectoria manchada de sangre imborrable», dijo Blanco, que lamentó que la formación de Arnaldo Otegi sea «determinante» para la gobernabilidad de España, que se siga homenajeando a etarras y tratándoles como «héroes», que haya jóvenes todavía hoy que «legitiman» a ETA o que el PNV se haya negado a dedicar una calle de Vitoria a la memoria de su hermano.
«El Gobierno de España se dedica a las cosas del comer y otros al ruido», afirma Félix Bolaños
El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, censuró ayer el «entorno ensordecedor» generado por la oposición y lo contrapuso a la «política útil» por la que aboga el Gobierno, que «se dedica a las cosas del comer cuando otros se dedican al ruido o a la grandilocuencia». Sin citar al PP ni a ninguna formación en concreto, el ministro advirtió de que «cuando uno intenta buscar el ruido es porque no quiere debatir en profundidad».
El titular de Presidencia admitió que el Ejecutivo de coalición no está teniendo «una legislatura precisamente fácil», marcada en su inicio por la pandemia y ahora por la invasión rusa de Ucrania y las consecuencias en la economía mundial de la guerra iniciada por Putin. «Pese a ello, nunca hemos olvidado lo que necesita la gente», recalcó el ministro en un acto en Madrid, aludiendo a la reforma de las pensiones, a subsidios como el Ingreso Mínimo Vital o a la reforma laboral.
Vox advierte al líder del PP que carece de «credibilidad» para realizar el anuncio
El portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, afirmó ayer que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, carece de toda «credibilidad» al comprometerse a dejar sin vigor la Ley de Memoria Democrática, dado que cuando el Partido Popular gobernó, «no derogó nada» de lo que hizo el PSOE en el ámbito ideológico. El diputado de Vox considera que el PP «carece de la fibra moral y de la valentía necesaria» para adoptar una medida como la derogación de esa norma, porque encontraría «oposición». Puso a Mariano Rajoy como ejemplo, que no tumbó la Ley de Memoria Histórica impulsada por el PSOE, a pesar de que gobernó con mayoría absoluta. Espinosa de los Monteros explicó que su partido no participará en el acto de hoy en memoria de Miguel Ángel Blanco, al considerar que se trata de un «falso homenaje» en el que el PSOE «se mezcla con EH Bildu».