Camps atribuye a la dirección nacional del Partido Popular los contratos de la trama Gürtel

Mateo Balín MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Francisco Camps, expresidente de la Generalitat Valenciana.
Francisco Camps, expresidente de la Generalitat Valenciana. FERNANDO VILLAR | EFE

«Estoy libre de cualquier tipo de esclavitud con ninguna persona y menos con esta gente», declaró en el juicio en referencia al Bigotes, a quien definió como «colaborador político», pero en ningún caso «amigo». Atrás queda la llamada del famoso «te quiero un huevo»

08 mar 2023 . Actualizado a las 18:52 h.

El expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps declaró este miércoles como acusado en el juicio de una pieza separada del caso Gürtel. Procesado por delitos de prevaricación y fraude y con una petición de pena de dos años y medio de prisión e inhabilitación para empleo o cargo público, Camps responsabilizó a la «dirección nacional» del Partido Popular de la contratación con las empresas de la trama Gürtel. Lo hizo tras una pregunta de la fiscal anticorrupción sobre las presuntas irregularidades en la adjudicación a Orange Market, una de las empresas del Grupo Correa, del servicio de montaje del expositor valenciano en Fitur 2009 por 360.000 euros. «(Este contrato) es como la nada, es absurdo que me ocupase de esto», dijo Camps.

El acusado aseguró que la decisión de descargar en el Grupo Correa la organización de los actos de la formación regional vino decidida por «la gran instancia». «Nuestro partido es un partido centralizado, somos militantes del PP de España, no somos un partido federado, somos un partido nacional. Quien me lleva la campaña electoral del presidente de la comunidad es el partido de España. Todo está diseñado desde la dirección nacional», aseveró en respuesta a las preguntas de la fiscal Concepción Nicolás.

Niega su amistad con el Bigotes

Camps reforzó sus palabras después de que el Ministerio Público le expusiera una foto de un acto en el que habría participado el entonces líder del partido, Mariano Rajoy. «A mí nadie me dijo nada de ese señor», apuntó, en relación a uno de los cabecillas de la trama: Álvaro Pérez, alias el Bigotes, administrador de Orange Market, a quien definió como «colaborador político» pero en ningún caso «amigo».

«Fíjese cómo estamos Rajoy y yo en un acto del PP y este señor (Álvaro Pérez) está de cuclillas como tiene que estar. Fíjese como está el PP nacional. Nadie me dijo nada y nadie dijo nada extraño», apuntó. «Nunca jamás me ha preocupado quién ha organizado los actos en mis 40 años en el PP», indicó Camps, que negó cualquier relación personal con Álvaro Pérez, «solo profesional».

«Estoy aquí libre y feliz, libérrimo, libre de cualquier tipo de esclavitud con ninguna persona y menos con esta gente», enfatizó. ¿Pero fue a su boda?, le recordó la fiscal. «Sí, pero solo porque tenía una relación política conmigo. De ahí que hable de lealtad en la conversación intervenida de la Navidad de 2008», señaló Camps en referencia a la llamada del famoso «te quiero un huevo» que le soltó el Bigotes.