Sánchez brinda a EH Bildu su primera fotografía con un presidente del Gobierno

M. L. REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, junto a la ministra de Transportes en funciones, Raquel Sánchez, durante el desfile del Día de la Fiesta Nacional.
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, junto a la ministra de Transportes en funciones, Raquel Sánchez, durante el desfile del Día de la Fiesta Nacional. Chema Moya | EFE

Evita decir si llamará a Puigdemont y Otegi como hizo con Junqueras

13 oct 2023 . Actualizado a las 13:42 h.

El presidente del Gobierno en funciones y candidato a la reelección, Pedro Sánchez, concluye este viernes su primera ronda de contactos con los partidos parlamentarios, excepto Vox, de cara a su investidura y lo hará recibiendo a Junts, cuyo voto es clave para su continuidad en la Moncloa, y reuniéndose por primera vez con una representación de EH Bildu, en este caso sus portavoces en el Congreso, Mertxe Aizpurua, y en el Senado, Gorka Elejabarrieta.

La ronda la comenzó el lunes con el presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo. Siguieron el martes los portavoces del PNV, Aitor Esteban; y del BNG, Néstor Rego; y el miércoles, los de ERC (Gabriel Rufián), CC (Cristina Valido) y UPN (Alberto Catalán).

Sánchez será el primer presidente del Gobierno que reciba a una delegación de EH Bildu, la única formación que ha garantizado que apoyará la investidura. Sus seis diputados harán todo lo posible para evitar una repetición electoral que pudiera dar el gobierno al PP y Vox. Será el punto culminante del proceso de normalización que persigue el grupo para ampliar su base social, aunque sigue sin condenar el terrorismo de ETA. El partido mayoritario de los aberzales, que lograrán la deseada foto, es Sortu, que tiene en su dirección al último jefe de la banda, David Pla. Y el coordinador de EH Bildu es Arnaldo Otegi.

El antecedente a esta reunión ocurrió en diciembre del 2019 cuando Adriana Lastra y Rafael Simancas se fotografiaron con una delegación de EH Bildu compuesta por Aizpurua, Elejabarrieta y Oskar Matute en el Congreso. El acercamiento de PSOE y EH Bildu comenzó antes de esa fecha. Unos meses antes, los de Otegi se abstuvieron para que la socialista María Chivite lograse la presidencia autonómica de Navarra. Con la idea de dar carácter de normalidad a las relaciones del PSOE con los independentistas y ofrecer un gesto a ERC, el miércoles se publicitó la llamada de Sánchez a Oriol Junqueras, condenado por el Supremo en la causa del proceso independentista y posteriormente indultado por el Gobierno de coalición. La comunicación se produjo antes de que el socialista recibiera a Gabriel Rufián.

Siete votos de Junts

Más complicado es para Sánchez lograr el apoyo de los siete diputados de Junts, formación que ya adelantó hace días que o votará sí al líder socialista o habrá elecciones, pero que no se abstendrá.

Para ese voto afirmativo exigen amnistía y referendo de autodeterminación. Está por ver si, al igual que hizo con Junqueras, Sánchez telefoneará a los líderes de Junts y EH Bildu, formaciones que lideran respectivamente el expresidente catalán Carles Puigdemont, que reside en Bélgica tras huir de la Justicia española, y Arnaldo Otegi.

Al ser preguntado en el corrillo en el Palacio Real con motivo de la Fiesta Nacional, Sánchez se limitó a decir que hablará y se reunirá con los «grupos parlamentarios». Otro tanto señaló al ser cuestionado sobre si llamará a Otegi. «Yo me reúno y hablo con los grupos», insistió. Remarcó que referendo no va a haber y que la principal complicación son las elecciones catalanas, pero también la división entre ERC y Junts.

Una vez concluida la ronda de contactos con los líderes de los partidos con representación parlamentaria se abre ahora una fase en la que los distintos negociadores de las formaciones políticas tratarán de exponer sus condiciones más concretas para dar su apoyo a la investidura.