El voto negativo de Podemos corta las opciones de validar el decreto de conciliación, que entre otros aspectos ampliaba el subsidio de desempleo. Las medidas para paliar la crisis tuvieron que aprobarse en segunda votación, después del error en el voto del diputado de Sumar Gerardo Pisarello
10 ene 2024 . Actualizado a las 20:21 h.Tarde agridulce para el Gobierno en el Senado. El Ejecutivo logró aprobar el llamado decreto ómnibus con una votación ajustada: 172 votos a favor y 171 en contra. Para ello, fue clave la decisión de Junts, que optó por evitar participar en la votación.
Del mismo modo, la negativa de Podemos a apoyar el decreto de conciliación bloqueó esta medida. El voto en contra de los de Ione Belarra, según afirman desde esta formación, se debe a que la medida incluía un recorte en la prestación de desempleo para mayores de 52 años. Este decreto era una propuesta de Sumar.
El tercero de los decretos, el llamado plan anticrisis, logró la validación del Congreso (en una sesión celebrada en el Senado por obras en la Cámara Baja). Esta votación obtuvo el mismo resultado que la del decreto ómnibus. En la primera votación de estas medidas, el diputado de Sumar Gerardo Pisarello se equivocó al emitir su voto cuando se dirimía la validación o no del decreto anticrisis. La equivocación del político de los comunes, junto a la negativa a participar en la votación de los siete representantes de Junts, propició este empate técnico que forzó una segunda votación.
Esta réplica contó con la presencia del presidente del Gobierno, que se desplazó a la Cámara Alta tras su ausencia en las votaciones anteriores. El decreto se tramitará como proyecto de ley para recibir enmiendas. Los representantes de Junts, que no participaron en las votaciones anteriores, optaron esta vez por la abstención.
La ministra de Trabajo y líder de Sumar, Yolanda Díaz, calificó como «una gravísima irresponsabilidad» los votos negativos de Podemos y Junts al decreto de conciliación. Por su parte, la líder de los morados, Ione Belarra, solicitó al Ejecutivo aprobar el jueves un subsidio de desempleo «sin recortes» para mayores de 52 años. Podemos señala que, de darse esta condición, el Gobierno contaría con el voto favorable de sus cinco diputados. «Cuando el Gobierno negocia y no recorta, acordamos en favor de la gente», remarcó Pablo Fernández, coportavoz de la formación morada.
Tampoco salieron adelante, como estaba previsto con la aritmética parlamentaria actual, las enmiendas a la totalidad propuestas por Vox y el PP a la proposición de ley de la amnistía a los procesados judicialmente por el procés. La iniciativa popular contó con 171 sufragios favorables y 178 votos en contra. El propuesto por la formación de Abascal contó solamente con el respaldo de los 33 diputados de Vox.
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, aseguró que las decisiones del Gobierno «han sido marcadas desde Bruselas» y que, por tanto, «es la primera vez que el Gobierno traslada la soberanía nacional fuera de las Cortes Generales».
«Mi país no se merece este esperpento, esta deshonra, esta humillación», remarcó el político gallego, que receló de que «si tres decretos han supuesto un jaque al Gobierno, aterra pensar en cómo será cada semana en esta legislatura».
No es la primera vez que el Congreso da al traste con decretos del Gobierno de Pedro Sánchez. Ya sucedió en enero del 2019, cuando el PSOE gobernaba en solitario y vio caer un decreto ley sobre la regulación del alquiler. Fue rechazado por PP, Unidos Podemos, Ciudadanos, Esquerra (ERC), UPN, Bildu y Foro Asturias.
Y la situación se repitió en plena pandemia, en septiembre del 2020, cuando se derogó el decreto ley por el que se cedían al Estado los remanentes municipales, como se había pactado en el seno de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Aquel texto solo recibió el respaldo de PSOE, Unidas Podemos y Teruel Existe.