Sánchez defiende a Teresa Ribera frente a los «infundios y maniobras»

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

 La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, entrega la cartera del ministerio a Sara Aagesen, hasta ahora secretaria de Estado de Energía.
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, entrega la cartera del ministerio a Sara Aagesen, hasta ahora secretaria de Estado de Energía. A. PÉREZ MECA / EUROPAPRESS

Designa como sucesora en el ministerio y la vicepresidencia a Sara Aagesen

26 nov 2024 . Actualizado a las 08:18 h.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido hacer un cambio meramente quirúrgico en su Gobierno y sustituir a la hasta este lunes vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, por la exsecretaria de Estado de Energía Sara Aagesen. En una comparecencia en la Moncloa, Sánchez destacó que la nueva ministra mantiene «el rigor, la profesionalidad y el conocimiento experto» de Ribera en las materias de su departamento.

El líder del PSOE aprovechó la ocasión para felicitarse por el nombramiento de Ribera como vicepresidenta europea. Una designación que, según dijo, se ha producido a pesar de «infundios y maniobras» contra la exministra frente a los que ha terminado «triunfando la verdad y la evidencia porque la trayectoria y el buen hacer de Teresa Ribera están fuera de toda duda y representan lo mejor de nuestro país». 

Voto en contra del PP

Se refería así al movimiento del PP que anunció su voto en contra del nombramiento de Ribera por considerar que debe asumir sus responsabilidades en la catástrofe de la dana de Valencia.

«Nuestra pérdida en España es la ganancia de toda Europa y sé con certeza, además, que Teresa Ribera será una extraordinaria, una excelente vicepresidenta primera de la Comisión Europea»», aseguró Sánchez sobre los nuevos cometidos que la exministra asumirá de forma oficial mañana miércoles con la votación conjunta de todos los nuevos comisarios por parte del Parlamento Europeo.

Según el jefe del Ejecutivo, con Aagesen España «continuará siendo un referente europeo y mundial en materia de transición verde y justa», demostrando que es posible la creación de riqueza «al mismo tiempo que se reducen las emisiones contaminantes y se cuida el medio ambiente». Y todo ello, dijo, de manera «equitativa, solidaria y responsable». Nadie mejor que Aagesen para reemplazar a Ribera señaló, porque se trata de una de las «mayores expertas» en España «en transición energética y en política medioambiental».

Sánchez mantiene con el nombramiento de la nueva ministra su compromiso con la paridad en el Ejecutivo y la presencia de tres mujeres en las tres vicepresidencias del Gobierno. Aagesen, explicó, mantendrá una línea continuista con la gestión de su predecesora y proseguirá con el «impresionante legado» que deja Ribera. Sánchez limita su decisión a ese cambio en el Ministerio de Transición Ecológica, descartando aprovechar la ocasión para introducir más relevos en el Ejecutivo a pocos días de que el próximo viernes se celebre el congreso del PSOE en Sevilla.

El gravamen a las energéticas y el cierre de las nucleares, retos de la nueva ministra

Entre los retos a los que se enfrenta Sara Aagesen como ministra se encuentra uno que tendrá que acometer en breve: la prórroga del gravamen energético a partir del 1 de enero que el Gobierno tendrá que negociar con la mayoría de investidura después de haber pactado con ERC, EH Bildu y BNG que el impuesto se mantendrá, aunque estará bonificado para las empresas que inviertan en la descarbonización. Una comisión que integrará a los distintos grupos parlamentarios buscará fórmula para que ese gravamen, al que se opone Junts, permanezca en vigor desde el 1 de enero del 2025.

Entre los retos a los que se enfrenta Aagesen se encuentra también el del inicio de la clausura de la central nuclear de Almaraz, en Cáceres. Se trata de un proceso que debe concluir en el 2027, pero que tendrá que comenzar a tramitarse en las próximas semanas, si el Gobierno quiere llegar a tiempo para lograr este objetivo. Ribera mantuvo la intención de aplicar el calendario de cierre de todas las centrales de España en el año 2035.