La fragata realizó abordajes a 23 buques sospechosos de actividades ilegales
25 abr 2013 . Actualizado a las 15:27 h.La F-104 llegó esta mañana a su base del Arsenal de Ferrol después de casi seis meses fuera, período de tiempo en el que estuvo al mando de la operación Atalanta contra la piratería en el Índico entre el 6 de diciembre y el 6 de este mes.
Multitud de familiares y amigos de los integrantes de la dotación se dieron cita en el recinto militar para ofrecerles una emotiva bienvenida en la que, como es habitual, no faltaron las lágrimas, las pancartas y los abrazos.
Durante misión contra la piratería, además de coordinar la actuación de todas las unidades de la UE desplegadas en la zona, impidió el secuestro del mercante de bandera norcoreana Dae San el pasado mes de diciembre frente a la costa de Somalia.
A finales de febrero, proporcionó un apoyo decisivo en la detención de un grupo de acción pirata por parte de la fragata holandesa De Ruyter. El helicóptero de la F-104 logró abortar la huida de una de las embarcaciones sospechosas. También proporcionó asistencia y protección al Royal Grace tras su liberación y escoltó al petrolero Smyrni tras haber sido liberado por los piratas.
A lo largo de estos meses abordó un total de 23 embarcaciones sospechosas de piratería, escoltó a dos buques de Programa Mundial de Alimentos y apoyó a varios buques de interés nacional que transitaban por la zona considerada de mayor riesgo en el Cuerno de África.
Después de más de 30.000 millas náuticas navegadas, con un total de 136 días de mar en los más de cinco meses de despliegue, la fragata ferrolana ha contribuido al reparto de más de 30.000 toneladas de ayuda humanitaria a la población de Somalia.