Cándido Cao Pita, jubilado de As Pontes: «Cobro dous mil euros e pico brutos, ben me chegan porque vivo só e non teño hipoteca»

Fátima Fernández AS PONTES

FERROL

La prestación media mensual en la zona es de 1.151 euros, pero en As Pontes roza los 1.700, mientras que en Cerdido o Cedeira no alcanza los 900

10 mar 2024 . Actualizado a las 16:11 h.

Un grupo de hombres charlan animadamente en un banco de la plaza del Carmen de As Pontes. Es jueves, luce el sol, contra todo pronóstico, y el reloj marca las doce del mediodía. Son pensionistas, corroboran; jubilados, para más señas. Dos ponen pies en polvorosa al oír la pregunta de cuánto cobran. Otros dos no se mueven del banco, pero solo Cándido Cao Pita accede a desnudar sus finanzas: «A miña pensión está por enriba da media, cobro dous mil euros e pico, pero brutos eh». Trabajó en Endesa, claro, pensarán. Pues no, pero sí en una empresa auxiliar con la que conducía maquinaria pesada por la central de carbón.

Este hombre nacido en la parroquia pontesa de O Freixo hace 69 años lleva ocho sin trabajar. Primero se prejubiló con 61, gracias a los coeficientes reductores que acumuló en su vida laboral, tanto en la central térmica como antes en la Marina Mercante. Y después se retiró a los 65. De eso hace cuatro años.

Cándido reconoce que su pensión está por encima de la media: «A min chégame, vivo solo e non teño hipoteca nin nada, a vivenda na que vivo é miña, aínda que evidentemente sempre queremos máis», añade entre risas. Destaca que en el trabajo «estaba contento e ben, tiñamos bo ambiente e compañeirismo, pero considero que traballei xa demasiado, así que non o boto nada de menos», confiesa.

Y es que este jubilado pontés cotizó más de cuarenta años, «máis os que traballei sen Seguridade Social», precisa. Así, relata que empezó a los 16 años con el Icona limpiando montes y sin cotizar. Luego fue camarero en Ferrol, después estuvo en una cantera de pizarra y luego pasó por varias empresas esporádicamente.

Al lado de Cándido, un compañero de banco de 68 años también jubilado. ¿Su nombre? «Vámolo deixar así», responde. Aunque cuenta que cobra menos de mil euros: «Traballei nunha empresa de construción, pero tívenme que ir por enfermo e teño unha pensión pequena». ¿Le llegará para vivir? «Ten que chegar, hai que repartila», sentencia.

«Calquera pensión tiña que ser de mil euros para arriba, e hai moitas de 700 e de menos tamén», zanja.

Pensionistas «ricos», pensionistas «pobres» en la comarca

La Seguridad Social dedicó en enero 67 millones de euros a pagar las 52.256 pensiones a las que tienen derecho los habitantes de los veinte concellos que integran la comarca de Ferrol (incluidos Eume y Ortegal). El importe medio mensual de esa prestación fue de 1.151 euros, superior a la media gallega, fijada en 1.070. Por primera se superó la barrera de los mil euros.

Pero esas nóminas de jubilados, viudas o huérfanos son diferentes por concellos: más elevadas en aquellos con actividad industrial y empresas más potentes; y más bajas en los que dependen del campo, del monte o de la pesca.

Así, las pensiones superan los mil euros mensuales en trece de los veinte ayuntamientos de la comarca, mientras que están por debajo en otros siete. De acuerdo con las últimas estadísticas por municipios que maneja la Seguridad Social, correspondientes al pasado mes de enero, los beneficiarios de As Pontes cobran la prestación media más alta de la comarca: casi 1.700 euros al mes; seguidos por los de Fene, con 1.466; Ferrol, 1.393; Mugardos, 1.333; Neda, 1.320; Cabanas, 1.313; Ares, 1.312; Pontedeume, 1.280; y Narón, 1.229. Bajan de los 1.200 euros al mes los pensionistas de Valdoviño, con 1.182; A Capela, 1.158; As Somozas, 1.081; y San Sadurniño, 1.010.

Hay pensiones más modestas todavía: se cobran en Cerdido, con 842 euros. Las superan en Monfero, con 856; Mañón, 871; Ortigueira, 881; Moeche, 884; Cariño, 906; y Cedeira, 991 euros al mes.

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José Hurtado, secretario general de la Unión Comarcal de Ferrol del sindicato CC.OO., tiene claro que las pensiones son más elevadas en aquellos concellos situados bajo la influencia de empresas importantes como Endesa o de Navantia, en las que las bases reguladoras de los salarios son más altas. De ahí que As Pontes, Fene y Ferrol lideren ese ránking.

Hurtado alerta de que la reforma reciente de las pensiones supone un retroceso en el importe de esas prestaciones al modificarse el período de cómputo. Además, señala que los salarios más bajos de los trabajadores más jóvenes se traducirán con el tiempo en pensiones más bajas también.

Alberto Rey, alcalde de Cerdido, el concello de la comarca con las prestaciones más modestas de la zona, justificó que es así porque se trata de un municipio eminentemente rural, en el que la economía se sustenta sobre el sector primario (que incluye el forestal), en el que los salarios son más bajos y, por tanto, también los son las pensiones.

En toda Galicia, la Seguridad Social gastó en enero 830 millones de euros para abonar 775.000 prestaciones. Las pensiones de los gallegos son las segundas más modestas de España, por detrás de los extremeños.