La directora Jaione Camborda Coll inicia en el emblemático cine de Fene el rodaje de su primer largometraje, «Arima», un thriller psicológico con mucho poso poético
05 jun 2018 . Actualizado a las 16:47 h.Hace apenas un año, el cine Adriano de Fene a punto estuvo de convertirse en escenario del rodaje de La sombra la ley, la última película de Dani de la Torre. «Finalmente no pudo ser, así que nos quedamos bastante chafados», rememora Marta Barros, presidenta de Patio de Butacas, la asociación cultural que persigue la recuperación de la emblemática sala de Barallobre. Pero dicen que cuando una puerta se cierra, otra se abre. «Y eso es precisamente lo que le ha ocurrido ahora al Adriano. Con este proyecto por fin nos hemos podido sacar aquella espinita», dice encantada Barros.
Ese «proyecto» del que habla la presidenta de Patio de Butacas no es otro que Arima, el primer largometraje de la realizadora y guionista vasca afincada en Galicia Jaione Camborda y cuyo rodaje comenzó ayer mismo en el antiguo cinematógrafo de Fene. Las cámaras y las luces volverán a encenderse hoy allí y después el equipo pondrá rumbo a Mondoñedo y Santiago, donde continuará el rodaje del filme hasta mediados del mes de mayo.
Según explica el director de producción, José Alberto Fuentes, Arima es un «thriller poético», rodado íntegramente en gallego, con un estilo que se encuentra a medio camino entre Lynch y Cassavete y que cuenta la historia de cuatro mujeres y de una niña cuya vida se ve afectada de diferentes formas por la llegada de dos hombres al lugar en el que viven. De dar vida y poner rostro a los personajes de esa misteriosa trama se encargan Tito Asorey, Rosa Puga Davila, Mabel Rivera, Iria Parada, la niña Nagore Arias y Melania Cruz, la protagonista.
A estas dos últimas se las pudo ver ya ayer en Barallobre trabajando en la grabación de las primeras secuencias de la película junto a un equipo del que forman parte destacados profesionales de la comarca, como la propia Mabel Rivera, la también ferrolana Lorena Calvo -que se ocupa de la peluquería y el maquillaje- o el director de fotografía fenés Alberte Branco. Además, un pequeño de Fene, Javier Alonso López, tuvo la oportunidad de participar en el rodaje como figurante.
Como muchas de las viejas películas que se proyectaban antaño entre los muros del Adriano, Arima está siendo rodada en celuloide, con el objetivo de lograr la densidad y autenticidad de los 35 milímetros. «El formato digital es más frío, mientras que lo analógico tiene una imperfección que seduce porque resulta más natural», advierte José Alberto Fuentes.
En la película, el Adriano interpreta el papel de un cine abandonado, moribundo, aunque en la realidad -y gracias a Patio de Butacas- poco a poco está resucitando. Cine dentro de un cine que lucha por volver a albergar vida en su interior.
EN CORTO
Producción. Corre a cargo de Esnatu Zinema con el apoyo de los productores asociados Alfonso Zarauza y Carlos Martínez.
Apoyo. Colaboran la TVG, Agadic, Diputación de Lugo, Concello de Mondoñedo y Café Candelas.