El club vigués acapara todos los títulos nacionales en esgrima femenina
10 jul 2012 . Actualizado a las 12:04 h.La historia de la esgrima española le hace un hueco a El Olivo. El club vigués se ha convertido en el primero de la historia que logra un pleno en categoría femenina. Cuatro títulos oficiales en la modalidad de florete y cuatro campeonas de España viguesas: Irene Romero en categoría absoluta, María Mariño en júnior, Judith Rodríguez en cadetes y Laura Caballero en infantil.
El cuarteto de mosqueteras es el fruto de doce años de trabajo con el florete en Vigo de la mano de Manuel Mariño. «Las cuatro llevan trabajando muchos años, muy duro, no es ninguna sorpresa, aunque sí muy difícil que coincidan los cuatro títulos al mismo tiempo», asegura el maestro y entrenador.
Irene y María comenzaron muy jóvenes y a los 19 años (un mes separa a ambas) se han repartido los dos principales títulos. Sin embargo sus caminos han sido muy diferentes. Irene, la campeona absoluta, tardó en explotar. «Es la más constante de todas, nunca había estado en lo más alto, pero estaba ahí, ahora ha explotado y ha roto su techo», asegura Mariño. «Es el trabajo de muchos años y de mucha gente», prosigue la campeona.
María Mariño es todo lo contrario. Desde los diez años ha acaparado todos los títulos oficiosos y oficiales y un par de meses atrás se quedó a un combate de los Juegos Olímpicos. «La suerte no duró», se lamenta del Preolímpico. En ella están depositadas las mayores esperanzas para el futuro. «Es la chispa, ha sido la más brillante desde el principio y en el trabajo no se queda atrás», asegura el entrenador. Ella e Irene entrenarán la próxima temporada en Madrid con el equipo español.
Judith y Laura, 16 y 14 años respectivamente, completan el círculo. «Es la voluntad, se propone una cosa y la consigue, no falta a un entrenamiento ni lesionada», certifica Mariño de la cadete. Laura es la última en llegar, pero dos años le han sido suficientes para hacerse un hueco en la foto, quizás porque «además de trabajadora, es muy observadora e inteligente», dos argumentos fundamentales en un deporte que mezcla inteligencia con el control de la fuerza.