«A mí me interesa tanto Homero como Flash Gordon»

Luís Pousa Rodríguez
Luís Pousa A CORUÑA / LA VOZ

FIRMAS

GUSTAVO RIVAS

27 jul 2012 . Actualizado a las 09:38 h.

Luis Alberto de Cuenca (Madrid, 1950) es poeta, traductor, profesor del CSIC, bibliófilo, ex director de la Biblioteca Nacional de España y ex secretario de Estado de Cultura. Pero ayer aterrizó en A Coruña para hablar de vampiros en el curso de la UIMP Cien años sin Bram Stoker, donde reivindicó tajante la altura literaria de Drácula.

-¿Por qué sostiene que «Drácula» es una de las diez mejores novelas de la literatura universal?

-Yo no me apeo de ese burro. Es una novela excepcional. Con Drácula ocurre un poco lo mismo que con el Quijote, que son novelas escritas en estado de gracia. Cervantes hubiera sido un estupendo escritor, pero sin el Quijote jamás habría sido el gigante que hoy es. Y a Stoker le pasa lo mismo: el resto de su obra no le llega ni al talón a Drácula. Es una portentosa novela, algo que está plenamente aceptado en las universidades británicas y estadounidenses.

-Sin embargo el mundo académico español es más reacio a aceptar este tipo de obras...

-Porque don Ramón Menéndez Pidal fue un genio para todo, pero se equivoca cuando define la literatura española como realista, de secano. En ese sentido, el mundo académico español todavía tiene que reciclarse. En las grandes universidades anglosajonas Stoker se estudia al nivel de Shakespeare.

-Joyce, Wilde, Stoker... Al final casi todos los grandes escritores ingleses son irlandeses.

-Conozco muy pocas ciudades como Dublín, donde hay hasta un museo de los escritores irlandeses... Así que el porcentaje de escritores por metro cuadrado en Irlanda es impresionante.

-Usted lo mismo traduce a Homero que se fascina con un cómic. Sería lo que Umberto Eco definía en su célebre ensayo como un integrado, ¿no?

-Exactamente. No está reñida una cosa con la otra. La cultura es una y no deben hacerse distingos entre la alta cultura y la pequeña cultura... Evidentemente hay que saber dónde se mueve lo que se ha degradado y lo que se mantiene incólume, pero a mí me interesa tanto Homero como Flash Gordon. Me ocurre lo mismo que a Eco.

-¿Usted que fue director de la Biblioteca Nacional, qué opina del suceso del Códice Calixtino?

-Pues me parece completamente delirante. La realidad siempre supera a la ficción. A lo mejor Menéndez Pidal tenía razón cuando decía que la literatura española era realista, porque lo que ocurre es que la realidad a veces es delirante. De todas maneras, hay que agradecerle al ladrón al menos una cosa: que esté impoluto el Códice Calixtino. Porque es una de esas diez joyas bibliográficas, como el Book of Kells del Trinity College de Dublín, que son insustituibles. La humanidad vive porque existen esas joyas.

-Como ex secretario de Estado de Cultura, ¿qué opina de la subida del IVA?

-No tiene buena pinta... Por lo visto son exigencias de la Unión Europea, pero no me gusta nada. Yo soy un liberal en economía y pienso que las soluciones iban más por otro lado, pero en cualquier caso habrá que arar con los bueyes que tenemos.

-¿Será que al final los vampiros están en Bruselas?

-No sé si en Bruselas o dónde, porque es otro asunto, como el del Códice Calixtino, que parece una extraña pesadilla, como la de Fritz Lang en Metrópolis. Se hace todo lo que se puede hacer y, sin embargo, sigue creciendo la prima esta de riesgo que más que prima es suegra.