La Costa da Morte es punta de lanza en la gestión de basura

V. gomila CARBALLO / LA VOZ

FIRMAS

Cerceda crecerá para atender las necesidades de toda Galicia

04 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La Xunta ya ha dado su visto bueno a la ampliación de Sogama y Cerceda se prepara para tratar la inmensa mayoría de la basura que se produce en Galicia, entre la que se encuentra la que generan los vecinos de la Costa da Morte. Hasta la instalación del complejo medioambiental en Morzós, la zona estaba salpicada de vertederos incontrolados. La mayoría eran municipales, pero ninguno tenía recogida y tratamiento de lixiviados, sistema de evacuación de gases, red de drenaje, cubierta o impermeabilización del sustrato. Eran muy raros los que sí tenían cierre perimetral. La Unión Europea permitía tener vertederos, siempre que cumpliesen las condiciones.

Sellados

A principios de noviembre del 2000 solo había sido sellados el depósito de Cerceda, que fue el primero, y el de Fisterra, que estaba en el cabo. También tenían acceso directo al mar los de Ponteceso y Malpica. Además, había otros quince basureros repartidos por toda la zona. El siguiente que se clausuró, ya en las Navidades de ese año fue el de Pardiñas, en Carballo, que llevaba 23 años en funcionamiento y suponía un importante problema medioambiental, puesto que acumulaba 50.400 metros cúbicos de desperdicios. A continuación le correspondió el turno al de A Laracha y poco a poco fueron cerrando uno a uno.

La ampliación de Sogama ya es segura, pero el proyecto todavía se encuentra en una fase embrionaria. El presidente, Luis Lamas, reconoció que la idea era instalar una planta en el sur de Galicia, pero también señaló que hacer más grandes las instalaciones de Cerceda creará empleo y abaratará costes.

Además, en los últimos días se ha sabido que dos empresas de la zona tienen la intención de instalar plantas de tratamiento de lodos y de compostaje en Coristanco. En A Laracha sigue PMA, que se dedica al tratamiento de residuos peligrosos y que durante la crisis del Prestige almacenó buena parte del fuel que se recogía en las playas de la Costa da Morte. Además, en la comarca hay cinco puntos limpios que reciben 3,5 toneladas diarias de residuos voluminosos. El uso de estas instalaciones se incrementa un ritmo del 5 % todos los años, lo que supone un enorme cambio en cuanto al tratamiento de residuos sólidos urbanos en solo doce años.