«Las oportunidades en Argentina para los españoles son escasas»

Elena Larriba García
Elena Larriba PONTEVEDRA / LA VOZ

FIRMAS

01 abr 2013 . Actualizado a las 10:43 h.

Francisco Javier Moldes Fontán (Barro, 1949) es consejero de Educación en la Embajada de España en Argentina y desde Buenos Aires lleva también las relaciones otros tres países del Cono Sur, Chile, Paraguay y Uruguay. Es un veterano en estas lides. Antes ya desempeñó tareas diplomáticas en materia educativa en Marruecos, Lisboa y Brasil. Lleva seis meses en su actual destino bonaerense, adonde llegó en un momento complicado de las relaciones bilaterales, para encargarse de la promoción de nuestra cultura y el seguimiento de centros educativos donde se imparte la titulación española. Moldes no ha podido venir esta Semana Santa de vacaciones, pero la Red ha hecho posible está entrevista.

-¿En qué consiste exactamente su tarea en esos países?

-Básicamente, en todo aquello que se refiere a las relaciones del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de España con los Ministerios de Educación de Argentina, Chile, Paraguay y Urugay: homologaciones y convalidaciones de títulos, intercambios universitarios, convenios de colaboración, becas...

-¿Cuántos centros educativos lleva desde su Consejería en los cuatro países?

-Son seis, privados casi todos. Se llaman Centros de Convenio y forman parte de la llamada RICE (Red Iberoamericana de Colegios Españoles). Gracias a dicho convenio los alumnos obtienen la doble titulación de enseñanza secundaria del país de que se trate y el de Bachillerato español.

-¿Viaja a menudo a Chile, Paraguay y Uruguay?

-Acabo de regresar de Chile y, además de tener reuniones con las autoridades educativas, he visitado centros en Viña del Mar y Curicó, también Casas de España en Valparaíso y Santiago. Con anterioridad estuve en Montevideo visitando un centro hispano-uruguayo. En estos países, lógicamente, se mantienen reuniones bajo la dirección de los respectivos embajadores. En el caso de Uruguay con Roberto Varela, actual embajador y exconselleiro de Cultura de la Xunta. Tengo pendiente un viaje a Paraguay, a la espera de que tome posesión un nuevo embajador español.

-¿Esta experiencia es muy diferente a las que tuvo antes en Portugal, Marruecos o Brasil?

-Poder vivir y trabajar en otros países es impagable. Otras lenguas, otras culturas... Por supuesto la experiencia argentina es distinta; todas son distintas, incluso en la tan cercana Portugal. En el caso argentino uno no se siente extranjero y, si además es gallego, casi es como estar en casa a pesar de los doce mil kilómetros que nos separan.

-¿Cómo encontró el país?

-Me he encontrado con una Argentina pujante aunque con problemas inflacionarios importantes. La tasa de paro es baja y el crecimiento económico también. En el área geográfica, Chile es el país que más está creciendo, en torno al 6% anual. La vida en la capital argentina es cara, tanto como lo puede ser en Madrid. Ello explica que existan conflictos laborales al solicitar los asalariados, tanto del sector público como privado, incrementos de un 25 % fruto de la alta inflación.

-¿Las relaciones entre España y Argentina después de la expropiación de YPF, filial de Repsol, están normalizadas?

-La expropiación de YPF es un asunto puntual y concreto. Cualquier nación democrática está en su derecho a expropiar por interés general, y las empresas y particulares también en llevar el litigio a los tribunales. En este caso, decidirán los tribunales internacionales. España es lógico que defienda a sus grandes empresas en el exterior, como cualquier país, incluida Argentina. Pero las relaciones bilaterales son mucho más que un caso concreto por muy importante que este sea. La diplomacia española, como la argentina, buscan la distensión, la normalización, y en eso estamos, aunque ello es competencia del embajador y de los diplomáticos de carrera, y no de un consejero de Educación. Los gobiernos pasan y los pueblos permanecen. La lengua, la cultura y la historia comunes son un cimiento demasiado fuerte para que algo puntual pueda afectarle. Muchísimas cosas nos unen y muy pocas nos separan.

-¿Cómo perciben los argentinos la crisis que sufre España?

-Están muy al día de lo que ocurre en España. Acá viven muchos hispanoargentinos y las relaciones familiares y económicas son muy fuertes. Ellos ya pasaron hace unos diez años por una situación muy compleja y saben valorar lo que pasa en España y otros países del sur de Europa.

-Tengo entendido que usted también tiene raíces ahí.

-¿Qué gallego no tiene lazos? En Buenos Aires existe la calle Moldes, en honor a antepasados del siglo XIX. Mi abuelo materno estuvo en Buenos Aires, aunque regresó pronto. Y una tía de mi padre vivió y murió aquí.

-¿Hay oportunidades para nuevos emigrantes españoles?

-Aunque el paro reconocido es de un 7 %, las oportunidades o posibilidades de trabajo en Argentina para los españoles son escasas. No estamos hablando de la histórica emigración hispano gallega, sino de jóvenes españoles preparados, que constituyen la actual emigración. A donde están llegando bastantes españoles es a Chile, país que cada vez demanda más profesionales, aunque conviene decir que los interesados se informen antes de partir de los requisitos de residencia y ejercicio laboral exigidos por las autoridades chilenas.

-¿Son altos ahí los salarios?

-No son altos y convertir pesos en euros puede distorsionar el análisis. Por ejemplo, un maestro en la enseñanza pública puede ganar unos 3.500 pesos en jornada partida y unos 7.000 en doble jornada, unos 1.000 euros al cambio oficial.

-¿Y la vivienda o la sanidad?

-El mercado inmobiliario está caro en Buenos Aires, prácticamente igual que Madrid o más. La sanidad pública española es una de las mejores del mundo, a pesar de los recortes. Y la argentina, en cuanto a medios materiales e infraestructuras, no está tan arriba, pero los profesionales sanitarios están muy bien preparados.

-¿Tuvo oportunidad de ver cómo se celebró en la calle la elección de un papa argentino?

-Sí, vi cómo celebraron a lo grande la elección del papa Francisco. Estaba en una reunión en el Ministerio de Educación argentino cuando comenzaron a repicar las campanas de las iglesias; de ese modo nos enteramos los allí reunidos de la fumata blanca argentina. Las críticas de las Madres de Plaza de Mayo, y de otros sectores sobre al comportamiento de Bergoglio durante la dictadura militar se han quedado en casi nada. Todo lo publicado parece dejar claro que el actual papa se empleó a fondo tratando de salvar a sacerdotes y laicos de secuestros y torturas.

Francisco Moldes Fontán consejero de educación en la embajada de España en Argentina

«Los argentinos están muy al día de todo lo que ocurre en España»

«Chile es el país del área que demanda más profesionales preparados»

«Aquí no te sientes extranjero y, si eres gallego, es como estar en casa»