El policía local Santiago Martínez, de regreso a Vigo, reflexionaba ayer sobre el congreso universitario al que asistió los pasados días en Valencia sobre ciberdelincuencia. El próximo lunes será el encargado de adiestrar a 75 agentes. También investiga en su tesis doctoral.
-¿De qué debatieron en ese congreso en Valencia?
-Allí se trató la evolución de las tecnologías que afectan a menores como el acoso en las redes sociales, la transmisión de informaciones con ocultación de identidad, o la suplantación de la identidad.
-¿Qué está pasando ahora con la ciberdelincuencia?
-Ahora mismo, las fuerzas de seguridad trabajan en la ciberdefensa. El espionaje por Internet es una realidad, no hay más que ver el caso Snowden. El Gobierno apuesta por preparar a su personal de defensa porque el espionaje en la red es algo que afecta a la seguridad nacional y a derechos fundamentales del ciudadano como su intimidad, coacciones, acoso sexual, fraudes o suplantación de identidad.
-¿Tan graves son estos delitos?
-El hecho de que alguien entre en el sistema y controle a su merced las tecnologías puede poner en riesgo a mucha gente. Por ejemplo, puede cortar el sistema eléctrico y parar una fábrica de coches o dejar sin semáforos a una ciudad. Hay que pensar en protegerse y prevenir y adquirir esa cultura digital. Es lo que los niños deben entender, saber que tienen que entrar en las redes sociales protegidos con contraseñas y claves.
-¿Cuál es la última clase de delito que han descubierto?
-Hemos visto que hay una plataforma de páginas de contactos que tienen una herramienta llamada Radar que sirve para encontrar a gente en tu entorno y la distancia a la que estás de esa persona. Por ejemplo, te dice que tal persona está a 3 kilómetros porque el GPS que lleva el smartphone cuando está conectado a Google Maps da su localización. Entonces, en un caso de violencia de género, un hombre con orden de alejamiento puede hacer seguimientos a la víctima a través de Radar si esta no se percata de que tiene abierto el localizador.
-Pero se supone que para usar Radar hay que aceptar al amigo.
-Por eso, avisamos de que hay que desconectar el localizador GPS si no se va a usar Google Maps. Eso es parte de la cultura digital que los niños deben saber por su seguridad.
-¿Cuántos casos de «sexting» han detectado en Vigo?
-Es frecuente que los adolescentes se saquen fotos de parejita en el centro educativo. La chica está enamorada pero luego cortan y su pareja sube fotos a Internet. En Vigo, tenemos constancia de siete denuncias por sexting a adolescentes en el último año. Pero hay más casos, también en loscentros privados, porque, en algunos colegios llaman a los padres para arregarlo.
-Pero eso parecen chiquilladas.
-Una vez que cuelgas algo en la red ya no lo puedes controlar. Aunque luego lo borres, basta con que alguien lo copie y lo difunda en las redes de pornografía infantil y el autor eres tú y eres tú el que ha cometido el delito. Hay que tener cuidado con lo que colgamos en la Red.
-¿Y el «on line-grooming»?
-Un adulto se hace pasar por un chico de 13 para engatusar. En Vigo, una madre se hizo pasar por su hija y cazó al abusador.
-¿Y el robo de móviles?
-Dentro tenemos información sensible. Podemos usar una aplicación que destruya o resetee todos nuestros datos si lo roban. Es una garantía de que no caiga en malas manos. En el curso aprendemos cómo prevenir estos delitos contra menores y haremos demostraciones.