El extremo vasco del Compostela dice que el vestuario está «muy animado» y «a muerte» con el cuerpo técnico
15 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El Compostela visitará el domingo al Burgos con la intención de empezar a remontar el vuelo tras un decepcionante arranque liguero. El once santiagués, con serios problemas ante el portal contrario, ocupa el farolillo rojo del grupo primero de Segunda División B desde el inicio del curso, situación para lo que no estaba preparada esta plantilla. El colectivo blanquiazul, con solo cinco puntos en su casillero, viajará al histórico recinto del Burgos con idea de cambiar su rumbo.
El cuadro que prepara Iñaki Alonso, con sus delanteros titulares en la enfermería, tendrá de nuevo un difícil reo. Los santiagueses, que solo marcaron un gol en las ocho primeras jornadas y fallaron un par de penaltis, son incapaces de ver puerta. Ni los atacantes ni los hombres de la segunda línea se vieron hasta el momento con capacidad para romper el maleficio. El vasco Asier Goti, uno de los refuerzos de este verano, apuesta en Burgos por un Compos más efectivo.
«El equipo está trabajando con mucha ilusión y entrenando muy bien, con ganas de conseguir la victoria», explica Goti, quien solo piensa «en los tres puntos». Ya casi no vale el empate. La escuadra blanquiazul tiene que salir a por el triunfo desde el primer segundo en un difícil escenario, en donde el Burgos sumó siete de los doce puntos que disputó (dos victorias, un empate y una derrota ante el Tudelano). «Para ganar en Burgos está claro que debemos dar otra imagen y cambiar la mala dinámica que llevamos», subraya el extremo.
A Goti le gusta ganar con goles y con un fútbol vistoso. Sin embargo, entiende que a estas alturas hay otras prioridades. El equipo está obligado a sumar los tres puntos de cualquier forma. Cualquier método es válido, aunque insiste en que el Compostela «nunca va a renunciar a su estilo». Habla de «mala suerte» y de «falta de acierto» en el remate y en el último pase. Entiende que el equipo «necesita en estos momentos una alegría y una recompensa por el trabajo que está realizando».
Al Compos le gusta llevar la iniciativa y tener más posesión que el contrario. En Burgos, los blanquiazules intentarán romper su mala racha con la misma propuesta futbolística, pese a que se encontrarán con un adversario totalmente opuesto en sus planteamientos. Goti adivina un contrincante que «esperará atrás, en su área, jugará al pelotazo e intentará sorprender a la contra».
Remar en la misma dirección
Pese a las dificultades con las que se encontrará el conjunto gallego, Goti apunta que se afrontará el duelo «con mucha ilusión» y con un fútbol combinativo. Recuerda que el Compostela hizo méritos para tener más puntos en este tramo de la temporada. Sin embargo, no quiere echar la vista atrás y solo se centra en el futuro a corto plazo. «Llevamos muy pocos goles y fallamos penaltis que fueron decisivos, pero no vamos a rendirnos en ningún momento. No hay que pensar en los enfrentamientos anteriores y nada más que debemos centrarnos en el Burgos. Hay que ser realistas y ver el lugar que ocupamos en estos momentos. Todos debemos remar en la misma dirección para salir del último puesto este próximo domingo», explica el jugador de Barakaldo.
Aunque la situación es crítica, Goti asegura que el vestuario está «muy animado», con «muchas ganas» de afrontar el choque de Burgos y con la esperanza de iniciar el domingo una nueva etapa. Mantiene que el grupo está «a muerte» con el entrenador y con todo el cuerpo técnico y apunta que nadie piensa que el futuro de Iñaki Alonso en la capital gallega dependa del resultado que el equipo firme en Burgos.
El extremo vasco pide paciencia con este equipo, revela que el entrenador confía en todos sus jugadores y apunta que no es el momento de bajar los brazos. Ante la lesión de los delanteros Orbegozo y Gerard Oliva, Goti señala que la plantilla «confía mucho» en el canterano Chiño.