Fischler aclara que la reforma se retrasó por motivos técnicos, no por presiones estatales
GALICIA
El comisario aludió en la Eurocámara a una queja de Fraga en la que descalificaba al ex-director general de Pesca El comisario de Pesca, Franz Fischler, compareció ayer en la Eurocámara para tratar de cerrar la herida abierta entre los Quince acerca de la reforma de la Política Común de Pesca (PCP). En una intervención plagada de alusiones al ministro Arias Cañete y en la que no faltaron reproches al presidente de la Xunta, Manuel Fraga, Fischler negó tajantemente que el retraso en la presentación de su polémica reforma obedeciera a las presiones de España o de algún otro Estado miembro. Es más, mantendrá su propuesta.
23 may 2002 . Actualizado a las 07:00 h.La comparecencia parlamentaria de Fischler estuvo motivada por la polémica abierta entre Dinamarca y España respecto a la reforma de la PCP. Copenhague había acusado al Gobierno español de presionar a la Comisión Europea por diversos medios para que retirara una propuesta que supuestamente atentaba contra los intereses del sector pesquero español, en tanto que proponía suspender las ayudas comunitarias a la renovación de la flota. Fischler inició su comparecencia negando la existencia de estas presiones y afirmando que el reciente cese del danés Steffen Smidt como director general de Pesca «no tiene ninguna relación» con la polémica que rodea a la reforma de la Política Pesquera Común (PCP). A través de un discurso plagado de referencias a fechas, a llamadas telefónicas y a conversaciones con terceros, el eurocomisario austríaco alegó que la presentación de su iniciativa ¿que tendría que haberse producido hace un mes¿ se ha demorado por cuestiones meramente técnicas, debido a que era necesario pedir nuevos informes para «mejorar la comunicación en algunos puntos esenciales», como sería el capítulo social y la política de flota de la futura PCP. Llamadas y declaraciones Fischler reconoció estar al corriente de una llamada de José María Aznar al presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, en la que el primero habría transmitido al italiano su preocupación por los términos de la reforma. Pero negó que la comisaria Loyola de Palacio hubiese intervenido en Bruselas siguiendo instrucciones de Madrid para lograr una PCP más favorable a España, algo que insinuó el ministro Arias Cañete en un programa de televisión. «Arias me dijo que estaba muy cansado y que sentía mucho sus declaraciones», recalcó Franz Fischler, dando por válida la explicación. Más duro se mostró Fischler con el cese de Steffen Smidt. «Afirmar que este funcionario ha sido sacrificado por la presión de España, no tiene ningún sentido», esgrimió el comisario, quien incluso llegó a recriminar al presidente de la Xunta, Manuel Fraga, por haberle remitido una queja escrita contra el funcionario danés, que calificó de acusación «inoportuna e injusta». En España, la Federación Española de Cofradías exigió ayer al Gobierno que «siente» a Fischler ante el sector y justificar una propuesta que «podría llevar a los pescadores a la ruina».