
Reportaje | El balance definitivo de la lucha contra la marea negra El libro recientemente publicado por Medio Ambiente consolida unos métodos de lucha contra la contaminación inéditos en el mundo, a menudo improvisados sobre la marcha
04 feb 2006 . Actualizado a las 06:00 h.?uy pocos de los que en el 2002 iban en caravana hacia Roncudo, en Corme, para ver los desastrosos efectos de la marea negra del Prestige -hubo un cierto turismo de catástrofes- creerían entonces que los rastros del vertido, dos y tres años después, serían parte de la historia trágica de los naufragios. Pero como asegura el director del Cedre francés, Michel Girin, en su prólogo al libro La catástrofe del Prestige, limpieza y restauración del litoral norte peninsular, «finalmente se recogió prácticamente todo el fuel que manchaba el litoral, teniendo especial cuidado en arrancar sólo la cantidad mínima de arena, de guijarros y de especies que viven fijadas a las rocas». Este trabajo de precisión es ahora un logro relativizado por el paso de la catástrofe a un segundo plano, pero adquiere una dimensión diferente con el paso del tiempo. La publicación del Ministerio de Medio Ambiente, coordinada por el ex comisionado Xoán Novoa, pone en su justo lugar la lucha de los voluntarios, los hombres y mujeres del mar y, también, de los funcionarios y personal contratado de la Administración contra el enemigo procedente de las refinerías rusas. Además, el libro, gestado en los despachos del Centro para la Prevención de la Contaminación (Cepreco) que dirige Purificación Morandeira, consolida los protocolos establecidos sobre la marcha, al calor de la llegada de las mareas negras y bajo la presión de la opinión pública, un bagaje clave que será de gran valor si Galicia vuelve a ser otra vez víctima de su propia estadística. La publicación resuelve algunas dudas sobre una gestión de la contaminación marina que ha aportado novedosas fórmulas de lucha inéditas en el mundo, desde el empleo de buques pesqueros para luchar contra la disgregación del fuel hasta el increíble desafío de la extracción a 4.000 metros de profundidad. ¿Cuál fue la dimensión comparativa del vertido? Michel Girin da a entender en el prólogo que la cantidad de toneladas es un factor a relativizar con otras mareas negras, pues es fundamental la proporción de volátiles que tenía la carga. Y concluye: «El Prestige ha vertido por lo menos dos veces más fuel que el Erika y el doble de toneladas de hidrocarburos no volátiles que el Exxon Valdez». La única referencia similar en Europa sería la del Amoco Cádiz, con unas 60.000 toneladas de hidrocarburos no volátiles vertidas en 400 kilómetros de costa de Bretaña. ?TONELADAS VERTIDAS?POR EL «PRESTIGE» ¿Qué circunstancias a tener en cuenta para el futuro agravaron el vertido? Raúl Medina Santamaría, de la Universidad de Cantabria, desgrana las causas de uno de los récords de la marea negra del Prestige : los miles de kilómetros de costa afectados. Por un lado, el tipo de fuel, «con reducida volatilidad y prácticamente nula solubilidad», que aseguraba su permanencia en el agua durante meses y que, junto con su densidad, lo facultaba para viajar cientos de kilómetros. Además, su tendencia a emulsionar convertía una tonelada de fuel en cinco de chapapote. El lugar del hundimiento, además, propició la extensión hacia el Cantábrico. «Simulaciones numéricas realizadas por la NOAA [organismo medioambiental estadounidense] con los datos de viento de la estación de Vigo de los últimos 50 años -asegura Medina- muestran que más del 90% de los derrames que se efectúen en la zona del hundimiento en invierno acabarán en la costa de Cantabria». Por el contrario, las boyas lanzadas en verano fueron llevadas por las corrientes hacia el sur, en paralelo a la costa portuguesa. El tercer factor que agravó el vertido fue un período de temporales que se prolongó más de lo habitual: desde octubre del 2002 hasta mayo del 2003, con una secuencia de direcciones que fue fatal: comenzaron con noroeste, siguieron del suroeste desde el 23 de diciembre del 2002 y volvieron a ser del noroeste a partir del 3 de enero del 2003. «La acción del viento sobre una masa de fuel derramado es muy relevante en su trayectoria», concluye Medina. ?KILÓMETROS DE COSTA AFECTADA EN EL ATLÁNTICO Y EL CANTÁBRICO ¿Por qué sigue aflorando fuel entre los cabos de Fisterra y Touriñán? Por un lado, fue la zona donde impactó el vertido inicial del petrolero, mucho mayor del que se estimaba en un principio. Medina Santamaría considera, además, que el fuel se depositó en playas con perfil invernal, con poca arena y muy erosionadas. Así que el vertido que no pudo recogerse por inaccesibilidad o cantidad fue enterrado por sucesivos temporales. Con la llegada del verano, se recuperaron los perfiles de playa y el hidrocarburo quedó profundamente enterrado. Este fuel reaparece en los inviernos posteriores por la erosión. ESTIMACIÓN DEL GOBIERNO , EN TONELADAS, DEL VERTIDO INICIAL ¿Por qué afectó más a Cantabria que al resto del litoral cantábrico? Aquí intervienen las corrientes de plataforma. Estos flujos hicieron que el fuel pasara de puntillas por A Mariña lucense y Asturias. Pero el hecho de que el área cántabra del cabo de Ajo tenga la menor anchura de plataforma de todo el Cantábrico hizo que el vertido se concentrara allí. TONELADAS DE RESIDUOS RECOGIDAS EN CANTABRIA ¿Quiénes recogieron más fuel, los buques anticontaminación o los pesqueros? En términos absolutos, los buques pesqueros, pues suman 36.000 toneladas de residuos recogidos en el mar, frente a las 16.296 de los buques anticontaminación. Los vascos son los que más recogieron -20.995 toneladas-, pero era un residuo «más emulsionado y con menos proporción de hidrocarburo», asegura Francisco Alonso, ex comisionado de Fomento. Por tanto, las 10.785 toneladas recogidas por los pescadores gallegos tienen más valor, al ser un producto menos mezclado. Sobre los buques anticontaminación habría que hacer una puntualización similar -recogían un producto más puro que podía reciclarse sin generar residuos- y hay que recordar que su participación terminó en febrero del 2003, cuando las manchas ya estaban muy disgregadas. TONELADAS DE RESIDUOS RECOGIDAS POR LOS PESQUEROS 6 ¿Quiénes protagonizaron más jornadas de trabajo, los voluntarios o el personal contratado? Los voluntarios se emplearon a fondo en la fase más dura de la limpieza: cuando había que recoger manualmente el fuel. Durante los tres primeros meses hubo una media diaria de 2.597 voluntarios trabajando, hasta que se dio por terminada su participación el 15 de julio del 2003. A esto hay que añadir el dispositivo militar de los primeros meses, con una media de 1.695 soldados al día. Sin embargo, el personal contratado, utilizado para afinar más la limpieza mediante métodos especializados de cribado, hidrolimpieza y otros, contabilizó el 52,7% de los 1.380.395 jornales computados a 30 de septiembre del 2004. Los voluntarios se quedaron en el 30%.