Para añadir más incertidumbre entre los usuarios, un viaje en un mismo avión suele tener precios diferentes en la misma clase si lo comparten dos aerolíneas, circunstancia que en Galicia ocurre con Spanair y Air Europa, Vueling e Iberia, o también en Oporto entre la TAP y United Airlines. Sirvan ejemplos como el de un vuelo a Madrid para mañana fletado desde Lavacolla. Si se reserva con Spanair su precio es de 74,44 euros, pero si para el mismo asiento se elige Air Europa, el coste pasa a ser de 82,44, siempre sumada la comisión que el mayorista añade en concepto de comisión de la operación. Con Vueling e Iberia ocurre lo mismo también desde Santiago para un vuelo a Barcelona, con una diferencia de precio a favor de la primera de 19 euros, que alcanza los 27 en el mismo escenario en el caso de Vigo en el itinerario a Londres. A París, el vuelo con Air France llega a costar 887 euros y solo 279 si para el mismo avión compartido se elige Air Europa.
Pero ni siquiera un vuelo de una única compañía tiene el mismo precio si la reserva se hace a través de un mayorista o en la web de la aerolínea.
Precios diferentes
Volar a Madrid desde Santiago saliendo mañana con Ryanair cuesta 148 euros si la reserva se hace en su portal y 124 si la compra se efectúa a través de un mayorista como Rumbo, Destinia o Edreams. Pero no es una regla fija. A Londres, desde Lavacolla, resultó 24 euros más barato tramitar el vuelo desde la página de la aerolínea de bajo coste de Michael O'Leary que por medio de un buscador de vuelos ajeno a su firma.
Y es que nada da la apariencia de estar reglado en los precios de los viajes aéreos. El desglose de los billetes demuestra que apenas hay dos aerolíneas que imputen el mismo coste por tasas aeroportuarias. Un billete a Barcelona desde Vigo presenta un cargo por tasas de 7,44 euros con Spanair y de 23,49 con Vueling. En Alvedro las diferencias pueden variar de 7,44 a 29,44. Solo Ryanair llega a cobrar cero euros en tasas en un vuelo a medio plazo desde Santiago a Madrid.