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La oposición a los trazados frena el AVE atlántico hacia Portugal y Ferrol

GALICIA

Fomento se ve obligado a buscar recorridos de consenso en los tramos O Porriño-Tui y A Coruña-Betanzos

25 nov 2009 . Actualizado a las 02:03 h.

El paso de la alta velocidad por zonas densamente pobladas está generando más problemas de los previstos, hasta el punto de activar una fuerte oposición vecinal y política a los trazados que ha propuesto el Ministerio de Fomento en los dos extremos del eje atlántico de alta velocidad, hacia la frontera portuguesa y hacia Ferrol. Contrariamente a lo que suele pasar en la planificación de las infraestructuras, el aluvión de alegaciones de municipios y particulares ha hecho parar la potente maquinaria del ministerio, que se ha visto obligado a frenar varios estudios informativos y a buscar trazados de consenso que, en cualquier caso, nunca podrán contentar a todos.

El último efecto colateral de la oposición a un trazado es el retraso de dos años en el tramo de 9 kilómetros entre O Porriño y Tui anunciado el lunes en Lisboa por el ministro de Fomento, José Blanco. La oposición de los concellos de Mos y O Porriño al estudio informativo ha forzado el encargo de uno nuevo donde, al parecer, se tendrá en cuenta la reclamación de evitar el paso del ferrocarril por el centro urbano. En el proyecto que salió a información pública había una alternativa que evitaba áreas urbanas pero que, según diversas fuentes, supondría una compleja tramitación medioambiental. El Ayuntamiento de O Porriño reclama un trazado soterrado, informa Laura Míguez, y Fomento estaría dispuesto a abrir un período de consultas para consensuar otro trazado. Esto devolverá el proyecto a su estadio inicial y explica que la conexión con Portugal en territorio español no pueda estar lista antes del 2015.

En el extremo sur del eje atlántico la oposición al trazado ha sido básicamente política, a través de los municipios, aunque también plataformas como Defende Mos expresaron su rechazo al proyecto de alta velocidad.

Pero no es la primera vez que la planificación de Fomento tiene que frenar en seco por el descontento generalizado. En la continuación del eje atlántico hacia Ferrol, en el tramo A Coruña-Betanzos, la oposición, primero de los concellos y después de la sociedad civil, también ha obligado al ministerio a dar marcha atrás en sus documentos de planificación. Y todo ello en unos proyectos, tanto el del norte como el del sur, cuyos estudios informativos iniciales se licitaron en el 2000.

Mala planificación

Javier Farto, presidente de la asociación de afectados por este tramo del AVE, recuerda que la deficiente planificación de estos trazados en municipios con alta dispersión poblacional está en la raíz del problema y fue lo que obligó a Fomento a dar marcha atrás en el estudio informativo presentado en el 2007. Un proyecto, por cierto, que atravesaba la fraga de Cecebre, el bosque animado de Wenceslao Fernández Flórez. «Era un estudio totalmente deficitario, con planos antiguos que no tenían en cuenta los nuevos asentamientos ni elementos naturales y culturales de gran valor», dice Farto. Proyectos como este (un técnico dice con ironía que se llevan a cabo con el Google Earth) generan un aluvión de alegaciones y, en este caso, Fomento se vio obligado a elaborar un nuevo documento, esta vez de consultas previas, con tres hipotéticos corredores para el tren «que tampoco nos convencen». La mayoría de los municipios afectados -Cambre, Carral, Abegondo, Bergondo y Culleredo- coinciden en que no quieren el grueso del trazado por su territorio, una situación que en Fomento ven de difícil solución y para la que piden la mediación de la Xunta, que ya ha aceptado el envite.

Cercanías

Si Salva o Tren surgió para denunciar el desmantelamiento de la red convencional y demandar servicios ferroviarios de proximidad, entre estos afectados triunfa la idea de aprovechar la vía actual para un servicio de cercanías, aderezada con el hecho comprensible de que nadie quiere que el tren pase por su finca. Un sector no se opone radicalmente al tren de alta velocidad, serán exigentes con el trazado que Fomento plantee finalmente y preferirían una reforma de la traza actual.