06 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.
Las quemas controladas de rastrojos forestales o desechos agrícolas constituyen una práctica prohibida mientras dura la temporada de máximo riesgo, es decir, entre el 1 de julio y el 30 de septiembre. En ese tiempo, Medio Rural no concede ningún permiso. El alto riesgo de incendios en muchas zonas de Galicia ha obligado a la Xunta a extender la prohibición sine die. La sequía que padecen muchas parroquias convierte esta actividad, muy arraigada en el rural, en una práctica de alto riesgo, que puede dar lugar a incendios que se descontrolan, tal y como sucedió la primavera pasada en el municipio ourensano de Bande, donde ardieron más de 400 hectáreas. Medio Rural recuerda que el estado del suelo desaconseja las quemas.