Cree que el «absolutamente consolidado» presidente de la Xunta repetirá
21 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Pontevedresa de adopción, la presidenta del Parlamento autónomo, Pilar Rojo (A Coruña, 1960), es la única nueva cara gallega en la ejecutiva del PP salida del congreso de Sevilla.
-¿Sorprendida por entrar ahí?
-Estas cuestiones nunca las piensas hasta que te las dicen...
-¿Y cuándo se la dijeron?
-Durante el congreso, no me acuerdo muy bien de cuándo exactamente, el presidente me comentó la posibilidad, me preguntó si yo estaría dispuesta a ir, y a partir de ahí...
-¿Fue una cosa más de Feijoo, de Rajoy o un poco de ambos?
-Quien habló conmigo fue Feijoo, a quien debo mi lealtad, además, por supuesto, de a Mariano Rajoy. Formo parte del Partido Popular de Galicia y, como puede imaginar, jamás haría nada que su presidente no apoyara.
-¿Es que no tenía ganas de dar el salto a la política nacional?
-Si le digo la verdad, yo vivo el día a día y nunca me planteo metas más allá de un corto plazo, digamos, prudente.
-¿Cómo sale el PP del congreso?
-Sale un PP con un proyecto, un equipo y un líder muy consolidados. Sale un grupo unido, con más de un 97 % de los votos en torno a Mariano Rajoy. Y sale un partido que les ha dicho a los españoles cuáles son sus prioridades de gobierno, lo que le preocupa fundamentalmente: el empleo, la crisis económica... Un partido centrado, en suma.
-Y más monocolor que nunca.
-Más unido que nunca. Era un momento en que, después de las elecciones municipales, autonómicas y generales, otra cosa no hubiese sido muy entendible. Y el presidente lo ha correspondido con un gran discurso, asumiendo la confianza con humildad, pese a lo que refleja en este momento el mapa de España.
-Mientras pronunciaba ese discurso, en las calles se manifestaban millares de personas contra la reforma. ¿Lo entienden?
-Por supuesto, cualquiera tiene derecho a manifestarse. Pero me preocupa que no se hubieran convocado estas manifestaciones hace unos cuantos años, para evitar precisamente llegar a esta situación. A lo mejor eso da un poco la medida de la mala opinión que, de acuerdo con las encuestas, tienen los ciudadanos de los líderes sindicales.
-¿Fueron dóciles con Zapatero?
-Todos hemos visto cómo la situación iba agravándose día a día y ellos estaban como muy callados. Lo que me parece más sorprendente es que, si esa era su postura, precisamente ahora se salga a la calle contra un Gobierno que ha llegado hace nada.
-¿Hasta cuándo van a estar confrontando lo mal que lo haya podido hacer el Ejecutivo anterior con lo bien que lo pretendan hacer ustedes en adelante?
-Aquí no se trata de confrontar herencias, sino de dar un plazo razonable a un Gobierno que acaba de llegar y desde el primer momento se ha puesto a trabajar. También es de un Gobierno responsable, mirando hacia el futuro, contar cuál es la situación que uno se encuentra cuando llega, no asumir las culpas de algo que le viene dado.
-¿Y cómo se ha encontrado el PP gallego en el congreso?
-Hemos ido a un congreso nacional y hemos salido todo el partido, incluido el gallego, reforzado. Si me pregunta particularmente por la presencia dentro de la ejecutiva, pues me parece muy razonable en función...
-¿Solo muy razonable?
-No, diría incluso que muy buena, sobre todo si tiene en cuenta que el PP de Andalucía, donde viven casi el triple de personas que en Galicia, tiene ahí 11 representantes, y nosotros, 8.
-¿Qué le parece la decisión de Feijoo de aplazar el gallego hasta después de las autonómicas?
-Como presidente del partido, él establece las prioridades.
-Si fuera hoy, ¿obtendría un respaldo tan amplio como el recibido por Rajoy este sábado?
-Alberto Núñez Feijoo es un líder absolutamente consolidado y estoy convencida de que, como mínimo, tendrá igual apoyo que el presidente nacional.
-¿Y en las urnas, lo tendría?
-Creo que volverá a ganar, pero eso lo tendrán que decidir los gallegos en el momento en que los convoquen a las elecciones.
-Que va a ser...
-Ni idea. Es algo que compete al presidente decidir y yo en absoluto le he escuchado hablar de ello hasta el momento.
-Él dice rehuir el «ventajismo político». ¿Estrategia acertada?
-Él está trabajando mucho y bien, haciendo cosas que, aunque a algunos no les gusten, cree honestamente que son las mejores para Galicia. Y por eso las hace. Con ese sentido de la responsabilidad, no debería tener problema.