Pilar Rojo: «Son tiempos de remar juntos, no estamos para hacer tonterías»

Apela al consenso Pilar Rojo (A Coruña, 1960) en el inicio de su segunda legislatura al frente del Parlamento de Galicia.

-Por cómo ha empezado Beiras la legislatura, se presume, cuando menos, divertida.

-Bueno, dentro de lo esperable, estuvo bastante correcto, ¿no?

-¿Es que se lo aguardaba?

-Yo ya me imaginaba que iba a decir algo, estaba en su derecho. Dentro de su línea y su discurso, ha habido un ambiente de cierta amabilidad. Ya me gustaría que la gente durante toda la legislatura se disculpara si dijese algo que molesta, como hoy.

-¿Teme cuatro años broncos?

-Espero que sean de trabajo intenso y de esfuerzo compartido, porque la situación lo exige: son tiempos de remar juntos, no estamos para hacer tonterías si queremos que los gallegos confíen de nuevo en los políticos, en la política y en la importancia de este Parlamento. No me preocupa que la gente hable, que para eso estamos...

-Si saca el zapato Beiras, ¿qué?

-Pues, cuando saque el zapato Beiras, ya veré lo que hago. Aunque espero que no lo saque. Él es una persona que conoce el Parlamento bien, que ha sido diputado muchos años y que sabe que el respeto a las instituciones empieza por uno mismo.

-¿Por qué no han querido ampliar la Mesa del Parlamento? ¿Para que no estuviese AGE?

-La representación de los gallegos está en el Parlamento, no en sus órganos. Además, la Mesa solo puede ser modificada por ley. Y en esta casa a las minorías se las escucha porque el 99 % de las decisiones importantes se toman por acuerdo con la junta de portavoces, donde todos tienen sitio. Mire, aquí ya ha habido legislaturas con cuatro y cinco fuerzas y en la Mesa solo estaban PP y PSOE. Incluso Coalición Galega, con 11 diputados, no figuraba, y no por ello decía que estuviese mal representada.

-¿Aquello de reducir la Cámara de 75 a 61 diputados se va a quedar en promesa electoral?

-Ese es un compromiso de programa electoral y entiendo que la voluntad del PP es cumplirlo al máximo posible. Será el Grupo Parlamentario Popular el que decida el cómo y el cuándo.

-Como lo dejen para el final otra vez, igual se cae de nuevo...

-No tengo ni idea.

-Dice De Cospedal, de su partido, que los diputados autonómicos no deben cobrar. Y usted opina...

-Lo que diga ella me parece muy bien, pero yo creo que todo el mundo debe tener un salario digno por el trabajo que ejerce.

-Aquí los diputados rasos, redondeando, cobran 5.000 euros al mes, casi como un conselleiro. ¿De verdad no existe un punto medio entre eso y el coste cero?

-Desde que yo llegué a la presidencia de esta Cámara, en relación con los salarios, lo único que he hecho es bajarlos.

-Cierra la puerta a nuevas bajadas de sueldos, entonces.

-No, no, no. Soy de las que pienso que, al menos mientras dure la crisis, somos los primeros que debemos dar ejemplo.

-Pues usted percibe más de 8.000 brutos y el resto de los miembros de la Mesa, casi. Con total sinceridad, ¿no es un exceso?

-En la anterior legislatura me bajé el sueldo un 15 %, se lo recuerdo. Creo que tengo un salario muy digno, sí, pero un trabajo sin horario y unos gastos elevados obligados por el mismo. Sé a qué hora llego a esta casa, pero nunca a la que me voy... Pero si usted me dice que tengo un salario excesivo, yo le respondo que no me lo he puesto; de hecho, me lo he reducido.

-No se lo digo, se lo pregunto.

-Pues entonces yo le reitero que tengo un salario muy digno del cual no me quejo.

-¿Y eso lo ve la gente?

-Debemos lograr que los gallegos perciban que resolvemos sus problemas, que vean que aquí se trabaja más de lo que parece, que entiendan que fuera de la democracia parlamentaria no hay nada... A veces se demoniza demasiado al servidor público, sinceramente.

-Feijoo la nombró en el 2009, Feijoo la ratifica ahora en el 2012... ¿Con Feijoo se irá usted?

-No lo sé, nunca pienso en el futuro más allá del corto plazo.

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