El PSdeG rechaza investigar la trama de enchufes que denuncia Príncipe

Carlos Punzón
C. Punzón REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El PP vigués reduce el caso a una guerra política entre Caballero y el exalcalde

15 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El PSdeG no abrirá investigación alguna para dilucidar la veracidad de la segunda denuncia pública con la que el exalcalde de Vigo Carlos Príncipe asegura que existe una red de enchufes en el Concello ligada al entorno más cercano a Abel Caballero tanto en su gobierno municipal como en la cúpula de la agrupación local del partido que preside el actual regidor.

La dirección gallega de los socialistas se remitió ayer a la valoración del caso que ya había realizado en noviembre pasado su secretario general, Xosé Ramón Gómez Besteiro, para invitar a Príncipe a que ponga en manos de la Justicia sus denuncias y cualquier prueba que las justifique. Según considera la dirección del PSdeG, las acusaciones efectuadas por el ahora únicamente militante de base vigués, y que a finales de los ochenta llegó a ser vicesecretario general del partido en Galicia, se circunscriben a la gestión de Caballero como cargo público y no en el ámbito orgánico de la formación socialista, extremo que a tenor de la cúpula del partido podría determinar en ese caso su intervención. La sede central del PSdeG no había recibido aún ayer carta alguna de Príncipe solicitando una investigación de sus denuncias, que la cúpula socialista en todo caso estima como graves.

Parecida consideración merecieron ayer para el PP vigués las acusaciones del exalcalde hacia Caballero, con quien los conservadores vigueses mantienen ahora un inédito nivel de cordialidad. Según indicaron ayer fuentes de la dirección popular local, la denuncia de Príncipe debe ser enmarcada dentro de la disputa y batalla política que entienden mantienen Caballero y el exregidor. El PP se limita a señalar que ya el año pasado reclamó -en los medios de comunicación- una explicación por parte del alcalde sobre las acusaciones de enchufismo que se cernían sobre 22 personas vinculadas a destacados militantes del PSOE vigués supuestamente favorecidas con puestos de trabajo en el Concello y contratas de servicios municipales.

Ni el PP ni el BNG llevaron sus anuncios de exigencia de aclaración por parte de Abel Caballero al pleno de la corporación, donde el asunto solo llegó a ser motivo de un rifirrafe entre una edila popular y otra del PSOE.