Villares decidió incluir el documento político de los críticos, pero en cuestiones orgánicas se impusieron sus tesis
16 jul 2017 . Actualizado a las 14:33 h.Luís Villares repitió siempre que pudo su argumento de que no había muchas diferencias entre las tesis oficiales y las de los críticos, pero a la larga, En Marea se regirá bajo el modelo diseñado por el sector oficial, que refuerza su poder, aprueba un mayor margen salarial para sus diputados y cierra la puerta a los liberados políticos.
Documento político
La unidad popular. Los críticos creen que En Marea se está convirtiendo en un partido de corte galleguista, de ahí que hayan presentado un documento político alternativo que Villares incluyó finalmente en su empeño de «non optar por A ou B senón sumar A máis B». Su ofrecimiento no cerró las heridas.
Coordinadora
Reglamento de la dirección. La composición y el funcionamiento de la coordinadora es el principal desencuentro de las dos corrientes de En Marea. Frente a la portavocía rotatoria y plural que defendían los críticos, se mantiene la actual, que como recordó Ana Seijas, «xa está formada por dúas mulleres, eu e Victoria Esteban, e por un home, Luís Villares». En las redes sociales, Iago Martínez, de Marea Atlántica, criticó que con solo 30 votos de diferencia «a coordinadora crea unha portavocía nacional con atribucións de secretaría xeral».
Los sueldos
Más salarios pero sin liberados. No habrá liberados políticos, como querían los críticos, pero quienes cobran, podrán aumentar su salario si es menor al que percibían antes de entrar en política. El tope ahora está en 3.000 euros, cantidad que la coordinadora considera un sueldo «digno». El cambio beneficiará a la mayoría de los diputados, pero no a los de dedicación parcial, como Luca Chao.